Nuevas reglas del proceso para que niños inmigrantes víctimas de abusos soliciten la residencia legal permanente en Estados Unidos divulgadas este lunes agilizarán y facilitarán este trámite, que a veces demora hasta tres años, según activistas proinmigrantes.
"Son cambios administrativos, internos, en la política del Servicio de Inmigración y Ciudadanía (USCIS, en inglés) para que el programa sea más eficiente", explicó a Efe Luis Garza Zertuche, de la Alianza Nacional para Nuevos Americanos.
Las modificaciones, que entrarán en vigor el próximo 6 de mayo, se refieren a un programa de visas conocido como Inmigrantes Juveniles Especiales, que ampara a los inmigrantes menores de 21 años de edad víctimas de abuso, descuido, abandono o maltrato de los padres.
Las nuevas normas incluyen una actualización del requisito de edad de manera que ahora quedan protegidos de deportación los solicitantes que cumplan 21 años de edad mientras está en trámite su gestión.
Además, USCIS modificó sus requisitos de evidencias para asegurar que los menores víctimas de abuso, descuido o abandono por parte de sus mayores reciban del tribunal juvenil una clasificación que les permita avanzar hacia la residencia legal permanente.
El programa, creado en 1990, ha permitido que, después de que un tribunal determinara que necesitaban protección, más de 130.000 inmigrantes menores de edad obtuvieran la residencia legal permanente (tarjeta verde) desde 2010.
"Tomamos medidas para ayudar a los niños inmigrantes en Estados Unidos que han sido abusados o abandonados, y para ofrecerles la protección que les ayude a reconstruir sus vidas", dijo este lunes en un comunicado la directora de USCIS, Ur Jaddou.
"Estas políticas proporcionarán ayuda humanitaria a los jóvenes vulnerables para quienes un tribunal juvenil haya determinado que es mejor para sus intereses que permanezcan en Estados Unidos", añadió.
Estos inmigrantes tenían "larguísimas" esperas de hasta 36 meses para obtener la residencia legal permanente en el país, debido entre otras cosas al aumento en la llegada de menores desde Centroamérica, señaló Garza.
"Creemos que habrá mejorías, que les llegue más rápido su residencia, y así reciben un número del Seguro Social y están en condiciones de empezar a trabajar, protegidos de la deportación", agregó.
Garza señaló que una de las complejidades de este programa es que los tribunales juveniles han de trabajar coordinados con los tribunales de inmigración, "y habrá ahora más guías que aumenten la agilidad y la transparencia, y reduzcan las esperas".
Los inmigrantes menores de edad que llegan a la frontera sin compañía de adultos responsables y son detenidos por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) deben ser transferidos en un plazo de 72 horas a a Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR).
Esta agencia, que depende del Departamento de Salud, a su vez da albergue y cuidados a los menores hasta que sean localizados en EE.UU. familiares u otros adultos que se hagan responsables.
El Gobierno del presidente Joe Biden ha seguido aplicando la polémica norma sanitaria conocida como Título 42 para rechazar en la frontera a los migrantes a quienes se considera una amenaza para la salud pública pero, a diferencia del Gobierno de Donald Trump (2017-2021), permitía el ingreso de menores no acompañados.
Pero la semana pasada un juez federal en Texas falló en contra de esa política del mandatario demócrata de eximir a los niños que llegan solos a la frontera.
Las nuevas reglas de USCIS también aclaran que "no se puede" requerir que los solicitantes se pongan en contacto con sus supuestos abusadores mientras esta agencia federal toma una decisión sobre sus solicitudes, indicó el comunicado oficial.