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Para el Reverendo Billy y su Iglesia del Freno a las Compras, el Black Friday es prácticamente el diablo y, por supuesto, un motivo para salir una vez más a la calle a dar la batalla contra el consumismo.
Esta congregación neoyorquina -que no es una verdadera iglesia, sino un grupo a caballo entre el activismo y el teatro musical- lleva cerca de dos décadas de lucha contra los efectos que el capitalismo más salvaje tiene en el medioambiente y en las vidas de los ciudadanos.
"La forma en la que gestionamos nuestro presupuesto personal, ya sea para artículos de lujo o para subsistir, es la semilla, es el centro", explica a Efe el Reverendo Billy, cuyo nombre real es Bill Talen.
En el Black Friday, el gran día de las compras en Estados Unidos, Talen anima a todo el mundo a un "ayuno" consumista, a dejar ese artículo innecesario en la estantería y tratar así de detener el ciclo inacabable de producción, consumo y más producción.
SERMÓN EN UN TEMPLO DEL CONSUMISMO
Este año, el Reverendo Billy y los suyos han decidido llevar sus oraciones en esta fecha tan señalada al centro comercial más flamante de Nueva York.
Cartier, Chanel, Coach, Dior, Louis Vuitton, Rolex, Tiffany... Casi no hay marca de lujo que no esté presente en el nuevo centro comercial de Hudson Yards, el gran proyecto urbanístico inaugurado este año en el extremo occidental de Manhattan.
"Vamos a entrar en Hudson Yards porque daña a la Tierra", dice Talen, las manos unidas, a la quincena de seguidores que se han dado cita a la puerta de los grandes almacenes, en los que pocos minutos después, despliegan una gran fotografía del planeta Tierra y comienzan a cantar ante la sorpresa de los clientes.
¡Dejen de comprar, el mundo está ardiendo!, entonan a coro, formando un círculo y girando frente a una tienda de Dior.
"Agua es libertad, el mar está subiendo, dejen de comprar y márchense de aquí" siguen cantando guiados por el reverendo, ataviado con una camisa negra, pantalones y americana naranjas, una gabardina color crema y un alzacuellos blanco.
"Las grandes instituciones están arrastrando los pies. El Gobierno, las empresas, las instituciones religiosas, el Ejército... todos están esencialmente negando la crisis climática", denuncia.
"El liderazgo va a venir de la gente corriente, no va a venir de quienes tradicionalmente han sido nuestros líderes", añade.
Además de en las calles, entre noviembre y enero esta particular iglesia celebra las fiestas sobre los escenarios, con un ciclo de actuaciones en el Joe's Pub, un conocido espacio dentro del Public Theater de Nueva York.
Allí, el Reverendo Billy y un coro de 35 artistas y activistas dan misa cada domingo aprovechando la época más compradora, desde el Black Friday a las Navidades.
DOS DÉCADAS DE LUCHA
Según cuenta Talen, el grupo surgió casi de forma espontánea hace 20 años, cuando él mismo comenzó a "predicar" en las calles contra la "limpieza" de Nueva York que propugnaba el entonces alcalde Rudy Giuliani.
El actor, que vivía en el East Village, protestaba entre otras cosas en los jardines comunitarios del barrio, muchos levantados por familias puertorriqueñas en solares abandonados y que entonces estaban amenazados por el desarrollo inmobiliario de la zona.
Sin embargo, su lugar favorito, para él un símbolo de los problemas que golpeaban a la Gran Manzana, era una nueva tienda de Disney en Times Square, la que había sido meca del vicio y punto de reunión de individuos de toda clase y que avanzaba inexorablemente hacia el "centro comercial al aire libre" que es ahora.
"Empecé a predicar contra el trabajo de explotación en las fábricas y contra la gentrificación y el coro más o menos se reunió alrededor de mi, gente cantando y haciendo armonías junto a mí en la acera", recuerda.
A lo largo de los años, su protesta pacífica ha terminado en varios arrestos e incluso en una campaña a la Alcaldía, pues en 2009 Talen recibió el apoyo del Partido Verde para hacer frente a Michael Bloomberg.
CRISIS CLIMÁTICA
Para el Reverendo, los problemas que se daban hace dos décadas siguen siendo los mismos que hay hoy, multiplicados por lo que ahora sabemos de la crisis del clima.
"Creemos que la justicia medioambiental incluye el racismo, el sexismo, todos los asuntos...", explica Talen, que recuerda que "cuando el mundo esté ante su último aliento, solo habrá un tema y ese es el tema de la vida".
Por ello, por la Tierra y con especial fuerza en el Black Friday, el Reverendo Billy exclama un sonoro "¡Earthlujah!".
