La Organización Meteorológica Mundial (OMM), el brazo científico de las Naciones Unidas, ha lanzado una advertencia contundente: las temperaturas seguirán aumentando, en medio del récord histórico alcanzado el mes pasado como el junio más caluroso jamás registrado y dos récords de temperatura media diaria en esta semana.
Chris Hewitt, director de Servicios del Clima de la OMM, hizo hincapié en que este excepcional calentamiento en junio y principios de julio coincide con el desarrollo del fenómeno de El Niño, el cual se espera que intensifique el calor tanto en la tierra como en los océanos, generando temperaturas extremas y olas de calor marino.
Los datos del sistema europeo Copernicus revelaron que en junio la temperatura media fue 0.5 grados Celsius por encima de la media entre 1991 y 2020, superando así el récord establecido en el mismo mes de 2019. Además, según datos preliminares, el pasado lunes se alcanzó una temperatura media diaria global de 16,88 grados Celsius, rompiendo el récord anterior de 16,80 grados registrado en agosto de 2016.
Hewitt advirtió que se esperan más récords a medida que El Niño avanza y sus impactos se prolongan hasta 2024, una noticia alarmante para nuestro planeta. La OMM destacó que las comparaciones globales de temperaturas diarias se realizan a través de reanálisis, utilizando combinaciones de simulaciones satelitales y modelos informáticos.
El científico de la organización explicó que las temperaturas superficiales de los océanos también han alcanzado niveles récord en mayo y junio, y esto tendrá consecuencias en la distribución de los peces y en la circulación oceánica en general. Además, hizo hincapié en que el océano en su conjunto se está calentando y absorbiendo energía que permanecerá allí durante siglos. Las alarmas están sonando fuertemente debido a las temperaturas sin precedentes en el Atlántico Norte.
Recientemente, se han registrado olas de calor en el Atlántico, específicamente alrededor del Reino Unido, Irlanda y el Mar Báltico. Estos eventos extremos son una clara señal de que el calentamiento global está teniendo impactos significativos en la distribución de las temperaturas y en los ecosistemas marinos.
La situación planteada por la OMM resalta la necesidad urgente de tomar medidas globales para frenar el cambio climático y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, a fin de mitigar los impactos devastadores del calentamiento global en nuestro planeta y en la vida marina.