El Departamento de Pesca y Vida Silvestre de California (CDFW) ha confirmado la existencia de una nueva manada de lobos grises, especie en peligro otrora común en el estado, de donde fue virtualmente eliminada en la década de 1920.
La manada fue vista en julio pasado en el Bosque Nacional Sequoia en el condado de Tulare, en el norte del estado, por senderistas que reportaron el avistamiento.
Investigadores del CDFW acudieron al lugar y recolectaron muestras de heces y pelo que les permitieron confirmar que se trataba de lobos grises.
La nueva manada consta de al menos cinco lobos no detectados previamente en California, incluyendo una hembra adulta y cuatro crías (dos hembras y dos machos).
La hembra adulta es descendiente directa del ejemplar bautizado como OR-7, que llegó desde Oregón en 2011 y se convirtió en el primer lobo salvaje confirmado en California en casi 90 años antes de regresar al estado vecino.
Desde entonces, varios otros lobos se han aventurado a internarse en California desde Oregón.
Esta especie (Canis lupus) fue prácticamente exterminada en California a principios del siglo veinte por un programa nacional de erradicación patrocinado por el Gobierno federal en beneficio de la industria ganadera.
Para 2020 el CDFW había documentado la existencia de ocho lobos grises, pero ese año se reportó la muerte de una miembro de esa manada.
En un comunicado, el CDWF dijo que la nueva manada fue vista a 200 millas (321 kilómetros) al sur de donde fueron detectados los otros lobos.
Los lobos están protegidos por la Ley de Especies en Peligro de Extinción de California y federalmente en el estado por la ley correspondiente.
El CDFW recordó al público que matar o dañar intencionalmente a un lobo es un crimen penado. EFE