Los concejales Kevin de León y Gil Cedillo, quienes se han negado a renunciar tras la polémica por comentarios racistas y ofensivos que hicieron en una reunión, fueron suspendidos este lunes.
El presidente interino del Concejo de Los Ángeles, Mitch O'Farrell, señalo hoy que ha suspendido a ambos latinos, bloqueando su asistencia a una serie de actividades del órgano municipal.
La suspensión aumenta la presión para que renuncien a raíz de su participación en la polémica conversación, grabada en secreto, como ya lo hicieron ya Nury Martínez, quien era la presidenta del Concejo, y el líder de la Federación Laboral del condado de Los Ángeles, Ron Herrera.
En la grabación, difundida por el periódico Los Angeles Times, Martínez hizo comentarios racistas sobre el concejal Mike Bonin y su hijo, quien es afroamericano, de quien dijo que "parece changuito". También se refirió al fiscal de distrito George Gascón, diciendo que él está "con los negros".
Arremetió igualmente contra los inmigrantes indígenas mexicanos del estado de Oaxaca, a los que calificó de "feos".
Los demócratas Cedillo y De León se han rehusado a renunciar pese a la condena generalizada a su participación en esa conversación, en la que no sólo no objetaron los comentarios de Martínez sino que en ocasiones se unieron a ellos.
"Estos miembros (del Concejo) han perdido toda credibilidad, todo prestigio", dijo O'Farrell en una conferencia de prensa en el Ayuntamiento.
El presidente interino vetó a Cedillo y De León de participar en actividades de comités que tratan sobre desarrollo inmobiliario, vivienda y otros temas.
El Concejo tiene programada una reunión mañana martes para elegir un nuevo presidente, posición que O'Farrell ya ha dicho que no desea.
Expertos advirtieron a Efe que el escándalo profundizó la crisis de liderazgo latino de la ciudad y abrieron "viejas heridas" con la comunidad afroamericana.
"Ya había problemas de liderazgo y esto dejó una falta completa de líderes latinos en la ciudad", advirtió Miguel Tinker-Salas, profesor de Historia y Estudios Latinos en Pomona College.
Por su parte, Raúl Hinojosa, profesor de Estudios Chicanos de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), calificó el escándalo de "un golpe" muy serio al liderazgo hispano.