Las autoridades sanitarias canadienses afirmaron este viernes que la tercera ola de la pandemia está en retroceso y que este verano la población podrá empezar a socializar al aire libre, una vez que el porcentaje de vacunados con al menos una dosis alcance el 75 %.
La ministra de Sanidad, Patty Hajdu, y la doctora Theresa Tam, directora médica de Canadá, señalaron en una rueda de prensa que entretanto deben mantenerse las restricciones en vigor para disminuir el número de nuevos contagios.
Tam añadió que esta semana más del 50 % de los canadienses aptos para recibir vacunas contra la covid-19 han recibido la primera dosis.
Ante los problemas de suministro que ha sufrido Canadá, las autoridades médicas decidieron retrasar hasta cuatro meses la segunda dosis para incrementar el número de personas que reciben la primera, una medida única entre los países industrializados.
La decisión ha permitido que Canadá se haya situado rápidamente en uno de los 25 países del mundo con una mayor proporción de la población inmunizada parcialmente: De hecho, entre los países del G7, Canadá es ahora el tercero, sólo por detrás del Reino unido y Estados Unidos.
Pero Canadá cae al puesto 90 del mundo en cuanto a población totalmente inmunizada, con un 3,54 %, por detrás de Argentina, El Salvador, Colombia o México.
La aceleración de la llegada de vacunas al país norteamericano podría cambiar la situación rápidamente. La próxima semana, Canadá recibirá 4,5 millones de dosis de las vacunas de Pfizer y Moderna, una cantidad superior a lo previsto.
El jueves, llegaron a Canadá 665.000 dosis de la vacuna de AstraZeneca. Tam precisó que las dosis del suero de la compañía anglosueca serán destinadas a personas que ya han recibido la primera inyección.
En los últimos días, todas las provincias del país anunciaron que suspenderán temporalmente la vacunación con el suero de AstraZeneca principalmente por problemas de suministro, aunque algunas, como Ontario, la más poblada con casi 15 millones de personas, también adujeron los casos de trombos relacionados con esa vacuna.
Un total de 28 personas han desarrollado trombos en Canadá tras recibir el preparado de AstraZeneca y al menos tres mujeres han muerto.
Las autoridades médicas están esperando los resultados de varios estudios para determinar si es seguro administrar la segunda dosis de Pfizer o Moderna a aquellos que han recibido la primera de AstraZeneca.