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Estados Unidos, sin sus figuras, ganó con total autoridad la Copa Oro y amenaza con dejar atrás a México en la histórica lucha por la supremacía en la Concacaf entre los dos finalistas del torneo de 2021.
Bajo la dirección técnica de Gregg Berhalter, la selección estadounidense ha dado un par de golpes de autoridad ante el 'Tricolor' adiestrado por el argentino Gerardo Martino al ganarle primero la final de la Liga de Naciones de la Concacaf en junio y ahora la Copa Oro.
En la víspera del partido decisivo por la Copa Oro, Berhalter anticipó que "las finales se definen por pequeños detalles, como la táctica fija".
Y así sucedió: Estados Unidos se coronó con un remate de cabeza tras el cobro de un tiro libre al minuto 118 cuando parecía que los penaltis eran inminentes. "Hemos aprendido a jugar finales".
Para esta Copa Oro 2021, Berhalter no llamó a sus máximas figuras instaladas en el fútbol europeo. Armó una selección alternativa comenzando por el portero Matt Turner quien a sus 27 años jugó sus primeros partidos con el representativo estadounidense en el torneo de Concacaf.
Miles Robinson, el autor del gol del título en la final ante México, es un defensa central de 24 años que en esta Copa Oro jugó los seis partidos, pero antes sólo tenía dos juegos amistosos como seleccionado.
El defensa James Sands (20 años), el mediocampista Eryk Williamson (24 años) y el delantero Matthew Hoppe (20 años) debutaron en esta Copa Oro.
Con ellos, Berhalter se propuso dos objetivos: el primero era ganar el torneo de Concacaf y lo hizo de manera perfecta con seis triunfos.
El segundo objetivo era foguear a estos muchachos para afrontar el octagonal clasificatorio hacia la Copa del Mundo Catar-2022. "El propósito de esta lista era poner a estos jugadores en escenarios competitivos de Concacaf, previo a las eliminatorias mundialistas".
Tras la obtención de la Copa Oro el domingo en Las Vegas, Berhalter dio notas altas de calificación a sus jugadores: "Lo único que ha superado nuestras expectativas ha sido la mentalidad del grupo. Me ha asombrado la cohesión de este grupo, cómo los jugadores han respondido a los desafíos y cómo el equipo está tan concentrado en nuestros objetivos".
Desde que quedó definido que la Copa Oro 2021 se empalmaría con los Juegos Olímpicos, el seleccionador Gerardo Martino dio prioridad a la selección Sub 23 para elegir a los mejores jugadores de esa edad y refuerzos mayores a Tokio 2020.
Y así mientras la selección sub 23 ha lucido en Tokio 2020, la mayor fracasó en su obligación de revalidar el título de la Copa Oro y evidenció que México no tiene suficientes recursos humanos para armar dos selecciones competitivas.
En la Copa Oro quedó demostrado que México padece en la defensa central con Héctor Moreno que a los 33 años no tiene la forma física ideal y que está fuera de ritmo, y que Carlos Salcedo comete errores básicos y es presa de su soberbia.
De igual manera quedó evidenciado que varios jugadores brillantes de la selección de Tokio 2020 hicieron falta para resolver partidos en Copa Oro, por ejemplo Luis Romo, jugador de 26 años que sabe defender, contiene en la media cancha y tiene gol.
Los atacantes Diego Lainez de 21 años y Alexis Vega de 23, que han sido destacados por FIFA por su lucimiento en Juegos Olímpicos, hicieron falta como revulsivos al equipo de Copa Oro.
Ambos, además de Romo, están considerados en el entorno mexicano para sumarse al equipo que buscará la clasificación a Catar 2022 y no elementos como Alan Pulido y Rodolfo Pizarro que fueron llamados por urgencia más que por méritos.
Aunque hay voces de furia que exigen la renuncia de Martino tras el fracaso de la Copa Oro, como la del histórico Hugo Sánchez, también hay voces reflexivas que han llamado a hacer un rendimiento individualizado de los seleccionados.
"Los jugadores que deben de seguir y los jugadores que no, ése debe de ser el debate", expresó Francisco Villa, narrador en TUDN.
Así, mientras Estados Unidos jugó la Copa Oro pensando en ponerse a punto para la eliminatoria mundialista, este Octagonal de la Concacaf, que comienza en septiembre, luce tormentoso en el horizonte de México.
"El verano (boreal) de la selección mexicana garantiza drama en la eliminatoria mundialista. Con este nivel, habrá sufrimiento", sentenció David Faitelson, periodista de ESPN.
