La goleada del Real Madrid al Barcelona, con la que volteó la eliminatoria de semifinales de la Copa del Rey y selló su pase a la final ante Osasuna, es el segundo triunfo más amplio en el Camp Nou en la historia del clásico, después de un 1-5 en Liga en 1963.
Del triplete de Ferenc Puskas, también con un gol de penalti, se pasó al firmado por Karim Benzema. El Real Madrid firmó su segundo triunfo con mayor diferencia de goles tras el 1-5 en la décimo octava jornada de Liga de la temporada 1962/63.
Con Miguel Muñoz en el banquillo, su conquista del estadio azulgrana llegó con el triplete de Pukas y un gol de Alfredo di Stéfano más otro de Paco Gento.
En el presente, el primer gol en el Camp Nou del brasileño Vinícius igualó la eliminatoria de semifinales de la Copa del Rey, tras el 0-1 a favor del Barcelona en el estadio Santiago Bernabéu. Y en una gran segunda parte, el triplete de Benzema dio forma a un contundente 0-4.
Benzema había marcado tres goles en 19 clásicos en el Camp Nou y llevaba siete años sin marcar en casa del eterno enemigo. En un solo encuentro igualó el número de tantos que había logrado en 14 años desde que disputó su primer duelo ante el Barcelona con la camiseta del Real Madrid.
Se convirtió el delantero francés en el segundo jugador madridista que marca un triplete en casa del Barcelona, tras Puskás en el mayor triunfo madridista en el Camp Nou. Es el cuarto jugador en la historia del Real Madrid que marca tres goles en un clásico tras Amancio Amaro e Iván Zamorano.
El Real Madrid ha vencido en tres de sus cuatro últimas visitas al Camp Nou. Alcanza la final de la Copa del Rey nueve años después, de nuevo con Carlo Ancelotti en el banquillo