Dos meses después de que la pandemia del COVID-19 empezó a golpear el mercado laboral de Estados Unidos, casi 37 millones de personas han solicitado el subsidio por desempleo, y la semana pasada se iniciaron más de 2,9 millones de trámites der personas que perdieron sus trabajos.
El dato de la semana pasada, ,divulgado por el Departamento de Trabajo y que supera la expectativa de los expertos, indica que continúa el impacto de la pandemia, especialmente en el comercio minorista, mientras el gobierno federal, los gobiernos estatales, las autoridades sanitarias y la opinión pública continúan divididos acerca del ritmo en que tiene que llevarse a cabo el retorno a la actividad económica normal.
ARSENAL MONETARIO
Para paliar los estragos económicos, la Reserva Federal ha lanzado todo su arsenal monetario con inyecciones masivas de liquidez en los mercados financieros, compras masivas de deuda y ha bajado los tipos de interés prácticamente al 0 %.
Asimismo, el Congreso ha aprobado varios programas de estímulo fiscal por valor de casi 3 billones de dólares.
El informe semanal de los subsidios por desempleo llevó en los primeros compases de los mercados a una caída de 417 puntos, o el 1,8 % en el índice del Dow Jones, una similar en el índice Standard & Poor de 500 títulos, y una del 1,65 % en el índice compuesto Nasdaq.
El efecto de la pandemia del COVID-19 en el mercado laboral de la mayor economía del mundo alcanzó una cima de 6,87 millones de solicitudes del subsidio por desempleo en la última semana de marzo, y desde entonces las solicitudes semanales han ido aminorándose.
p> Después de los 3,17 millones de trámites iniciados en la semana que terminó el 3 de mayo, los analistas habían calculado unos 2,5 millones de pedidos para la semana que terminó el 9 de mayo.
El informe del gobierno indica que el promedio de solicitudes en cuatro semanas, que atenúa las fluctuaciones semanales y da mejor idea de la tendencia, se situó en 3,61 millones de trámites, comparado con un promedio de 4,18 millones hasta la semana anterior.
Florida, California, Georgia, Texas y Nueva York fueron los estados donde hubo mayores aumentos en las solicitudes de subsidio por desempleo, indicó el Departamento de Trabajo.
En la semana que concluyó el 2 de mayo había 22,83 millones de personas que percibían las prestaciones por desempleo, esto es el 15 % de a fuerza laboral, comparado con 22,37 millones en la semana previa.
NIVELES SIN PRECEDENTES
La semana pasada, el Departamento de Trabajo informó de que el índice de desempleo se disparó en abril 10,3 puntos porcentuales, hasta alcanzar una tasa del 14,7 %, un nivel sin precedentes desde la Gran Depresión de 1930.
Debido a la oleada de despidos provocada por las medidas de distanciamiento físico y cierres de negocios para combatir la dispersión del coronavirus, el desempleo ha pasado en EE.UU. del 4,4 % registrado en marzo al 14,7 % el mes siguiente, el mayor incremento de este indicador nunca visto hasta la fecha.
David Mericle y Ronnie Walker, dos economistas de Goldman Sachs Group, han revisado sus cálculos sobre el nivel al que podría llegar el desempleo, pasando de un 15 % a un 25 %, y estimaron que la tasa se mantendrá en alrededor del 10 % hacia fin de año, el mismo nivel que marcó en octubre de 2009, cuando el país salía de la Gran Recesión.
Las cifras contrastan con las que durante varios meses y hasta febrero mostraban un promedio de solicitudes de subsidio por desempleo de 250.000 por semana, y la tasa de desempleo se mantenía en torno al 3,5 %, la más baja en medio siglo.
El Departamento de Comercio ha informado que la actividad económica se contrajo a un ritmo anual del 4,8 % en el primer trimestre de 2020 por los efectos de la pandemia del coronavirus. Se trata de la mayor caída desde el último trimestre de 2008, con el estallido de crisis financiera que provocó la Gran Recesión, en el que la economía se redujo a una tasa anual del 8,4 %.
Como contraste, la actividad económica en 2019 registró una expansión del 2,1 %.
Estados Unidos alcanzó este miércoles la cifra de 1.389.935 casos confirmados de COVID-19 y la de 84.059 fallecidos, de acuerdo con el recuento independiente de la Universidad John Hopkins.