Un ataque contra una adolescente birracial en Madison es investigado el jueves como delito de odio después que la joven reveló a la policía que un hombre blanco la quemó con líquido de encendedor a pocas cuadras del lugar de las protestas frente a la legislatura.
Althea Bernstein, de 18 años, dijo a la policía que iba en su auto cerca del Capitolio alrededor de la 1:00 de la mañana del miércoles y se detuvo en un semáforo con su ventanilla baja. Escuchó a alguien lanzarle un insulto racista y vio a cuatro hombres blancos.
Uno de ellos le roció el líquido en la cara y el cuello y le arrojó un encendedor en llamas. La adolescente agregó que puso en marcha su auto, apagó las llamas y condujo hasta su casa, donde su madre la alentó a acudir al hospital. Allí fue atendida por las quemaduras. El personal del hospital cree que el líquido era bencina de encendedor, de acuerdo con la policía.
La agresión tuvo lugar durante una noche de violencia que incluyó el derribo de dos estatuas frente al Capitolio y el ataque a un senador estatal. Entre 200 y 300 personas se concentraron para protestar contra el arresto de un afroestadounidense que gritó a los clientes de un restaurante con un megáfono y portando un bate de béisbol.
Alguien arrojó una bomba incendiaria a un edificio del gobierno y trató de irrumpir en la legislatura, pero la policía se lo impidió con aerosol de pimienta. El gobernador Tony Evers convocó a la Guardia Nacional para proteger la propiedad pública.
El miércoles por la noche unas 40 personas se concentraron pacíficamente para exigir la libertad del hombre arrestado. Un centenar de personas se manifestó frente al Capitolio.