Un entrenador de boxeo y exluchador de artes marciales que golpeó a puñetazos a un policía durante el asalto del 6 de enero al Capitolio de Estados Unidos fue condenado el miércoles a 41 meses de prisión, una sentencia que probablemente servirá de referencia para decenas de casos similares.
Scott Fairlamb, de 44 años, es el primer condenado por atacar a un policía durante la revuelta. Su pena de 41 meses es la más larga de las 32 condenas relacionadas con el asalto hasta el momento.
El castigo a Fairlamb probablemente servirá de referencia para otros jueces que condenarán a los insurrectos que chocaron con la policía. El juez federal Royce Lamberth destacó el hecho de que Fairlamb era el primer condenado por atacar a un agente y que probablemente habrá más declaraciones de culpabilidad en los próximos meses.
Fairlamb evitó un juicio al declararse culpable.
“Si usted hubiera ido a juicio, no creo que hubiera un jurado que lo absolviera”, dijo el juez.
Fairlamb, dueño de un gimnasio en Nueva Jersey, pidió perdón y expresó remordimiento por sus actos, que calificó de irresponsables y temerarios.
“Asumo plena responsabilidad por lo que hice ese día”, dijo Fairlamb. “Yo no soy así, no es así como me criaron”.
La fiscalía había pedido una pena de tres años y ocho meses de prisión, ya que Fairlamb fue uno de los primeros en asaltar el Capitolio e incitó a otros a ejercer la violencia.
Entre quienes recibirán su sentencia próximamente están el insurrecto descamisado que se presentó como el “QAnon Shaman”. Jacob Chansley, que apareció con la cara pintada y un gorro de piel con grandes cuernos, se convirtió en “la cara pública de la insurrección en el Capitolio”, dijeron los fiscales en un documento a la corte el martes por la noche. Recomendaron una pena de cuatro años y tres meses para el hombre de Arizona, cuya sentencia se pronunciará el miércoles próximo.