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Las hamburguesas hechas con carne producida a partir de células de vaca cultivadas en laboratorio tienen ahora un sendero más claro para llegar a los supermercados, luego que reguladores federales en Estados Unidos delinearon el jueves cómo será monitoreada esa nueva categoría de alimentos.
La carne de células cultivadas de animales tendrá que ser sometida a inspecciones de la agencia, al igual que otras carnes, indicó el Departamento de Agricultura.
Carmen Rottenberg, del departamento, dijo que ella prevé que las inspecciones sean similares a las de otras plantas de procesamiento de carnes, pero apuntó que aún hay mucho que no se sabe, pues las compañías no han comenzado la producción comercial.
Rottenberg dijo también que el departamento espera que se requerirá una nueva etiqueta para la carne cultivada, por lo que probablemente no podrá usar términos como “carne molida” o “hamburguesa”.
Las compañías que están desarrollando la carne cultivada a partir de células dicen que sus productos serán más humanos y beneficiosos para el ambiente, toda vez que no requieren la cría y sacrificio de animales.
No se sabía cómo iba a ser regulada la carne cultivada hasta que llegó noviembre, cuando el Departamento de Agricultura y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) dijeron que compartirían la supervisión.
El acuerdo, formalizado el jueves, dice que la FDA regulará las primeras etapas del proceso, incluyendo la recolección y cultivo de las células, antes de entregarle las tareas de supervisión y etiquetado al Departamento de Agricultura.
Las agencias continuarán trabajando juntas para determinar los detalles.
