Una vivió toda una aventura para recuperar la maleta que le perdió la aerolínea United durante un vuelo, gracias a la ayuda de un rastreador AirTag.

Sandra Shuster, residente de Colorado, tomó un avión a Denver desde la ciudad de Baltimore, en Maryland, donde había viajado junto a su hija. Pero el vuelo realizó una escala en Chicago. Las pasajeras habían acudido a un torneo de lacrosse de la joven de 15 años.

Cuando madre e hija llegaron a Denver descubrieron que United había perdido la maleta facturada en donde llevaban el equipo de lacrosse de la joven.

Las viajeras se acercaron al personal de la línea aérea para reclamar por su equipaje. Sin embargo, los trabajadores en el aeropuerto se limitaron a decirles que su maleta llegaría en el siguiente vuelo procedente de Chicago, donde habían hecho una escala.

Además, les dieron un número de caso y un teléfono al que podían llamar para pedir más detalles. Aunque Sandra se comunicó para darle seguimiento al caso, su maleta nunca llegó. Al volver a reclamar, los trabajadores le dijeron que su equipaje se había quedado en Baltimore.

Sin embargo, la viajera había puesto un rastreador AirTag a la maleta, pues temía por el tratamiento que le dan las aerolíneas al equipaje. Al revisar la ubicación se dio cuenta de que la maleta con el equipo de lacrosse estaba en el área de reclamo de equipaje del Aeropuerto de Chicago y no en Baltimore, según contó a CNN.

La línea aérea le aseguró que no había registro de que la maleta estuviera en el Aeropuerto Internacional O'Hare, pese a que la viajera mostró las pruebas. Incluso le dijeron que su número de reclamo estaba mal y se negaron a llamar a para preguntar.

Ruby, la hija de Sandra Shuster, tuvo que pedir prestado otro equipo de lacrosse para competir en un torneo dos días después en California, pues el suyo seguía en Chicago.


Viajera tuvo que tomar un vuelo a Chicago para recuperar la maleta


De regreso del segundo viaje, la viajera le insistió al personal de United que la maleta que habían perdido seguía en Chicago, de acuerdo con lo que marcaba su AirTag.

Los trabajadores le dijeron que seguramente alguien había robado su maleta y tirado el rastreador. Ante la resistencia, la madre de Ruby optó por hacerse cargo de la situación y tomó un vuelo hasta Chicago para rescatar el equipaje.

Mientras United le recomendaba que no viajara y afirmaba que trabajaba para localizar el equipaje, Sandra llegó al Aeropuerto Internacional O'Hare y en menos de 30 segundos la encontró en la zona de reclamo de equipaje.

Sandra Shuster contó a CNN que luego averiguó después que el trabajador que había documentado la maquila había puesto la etiqueta de otro pasajero, quien viajaba únicamente de Baltimore a Chicago, por lo que nunca se subió a la aeronave con destino a Denver. Cuando nadie lo reclamó, lo mandaron a una oficina especial.

La mujer solicitó a United que le regresaran las millas que gastó en el vuelo para recuperar su maleta y al final la aerolínea se las devolvió y le dio un crédito adicional para otro viaje.

Google News

TEMAS RELACIONADOS