Por años, la cadena Starbucks había ofrecido estadía en sus sucursales, uso de redes de internet y acceso a instalaciones como los baños sin consumo necesario. Ahora, esto ha cambiado.
En una actualización a sus políticas recientemente compartida en línea, la empresa revirtió su política de puertas abiertas u open door tras casi siete años y ahora exige que los usuarios consuman o se retiren de los establecimientos.
A partir de la actualización, llamada Código de Conducta en la Cafetería, las personas que visiten sus tiendas deberán consumir algo del menú para que se les permita quedarse, usar las redes de internet e incluso entrar al baño.
Otras reglas compartidas en dicho código son las siguientes:
En caso de que los usuarios no acaten alguna de las reglas actualizadas, deberán abandonar la tienda y se podrá llamar a las “fuerzas del orden” si es necesario.
En un comunicado, el portavoz de Starbucks Jaci Anderson dijo que el cambio de la política open door se hizo con el objetivo de priorizar la atención y servicio de los clientes y socios.
“Queremos que todos se sientan bienvenidos y cómodos en nuestras tiendas. La mayoría de los minoristas ya han implementado un Código de conducta para cafeterías... Esto significa que nuestras cafeterías, patios y baños son para clientes y socios. Al establecer expectativas claras sobre el comportamiento y el uso de nuestros espacios, podemos crear un mejor entorno para todos”, dijo.
Las nuevas medidas serán aplicadas en todas las tiendas de Estados Unidos por ahora; el código estará exhibido en todas las cafeterías para que los visitantes estén enterados de las medidas y para “recordar a los clientes el papel que desempeñan en la creación de una cafetería comunitaria que se acogedora”.
El cambio de la política open door de Starbucks se hizo como parte de una estrategia impulsada por el director ejecutivo de la empresa, con sede en Seattle, Brian Niccol, para atraer a más clientes e impulsar sus ventas, que en los últimos años han bajado.
Asimismo, se busca convencer con estas medidas a los usuarios de quedarse en la tiend en lugar de pedir café o comida para llevar.