En abril la Ley CARES comenzó a proporcionar ayudas económicas a las personas más afectadas por la crisis originada durante la pandemia de coronavirus en Estados Unidos.
Las primeras personas en recibir los llamados cheques de estímulo fueron aquellas que presentaron sus declaraciones de impuestos de 2019 o 2020, le siguieron los estadounidenses desempleados, con Seguro Social, jubilados, estudiantes y dependientes de contribuyentes.
Hasta inicios de junio, el Servicio de Impuestos Internos (IRS por sus siglas en inglés) repartió más de 160 millones de cheques de $1,200 dólares por contribuyente y hasta $3 mil 400 por parejas, a la espera de un segundo pago aprobado por el Congreso.
Ahora, a medida de que la crisis económica sigue avanzando de la mano del coronavirus a lo largo del país del norte, los legisladores están siendo presionados para dar un mayor apoyo financiero a los más necesitados a partir de julio.
Entre las múltiples propuestas para emitir un nuevo paquete de estímulo, Mitch McConnell, líder mayoritario del Senado dominado por los republicanos, ha revelado un plan para favorecer principalmente a personas de bajos recursos.
En una entrevista llevada a cabo en Kentucky, McConnell dijo “Creo que las personas que más han sido golpeadas son las que ganan alrededor de $40 mil al año o menos. Muchos de ellos trabajan en la industria hotelera. La industria hotelera, como ustedes saben, acaba de ser atormentada 一hoteles, restaurantes一, y así (más controles de estímulo) podrían ser parte de eso. El país necesita un último impulso).
McConnell no dio detalles claros de su proyecto de ley, sin embargo, dijo que estaba siendo diseñada para cubrir las necesidades básicas de los hogares de bajos ingresos, pero sin ser tan generosa como la Ley CARES aprobada en marzo ya que dicho proyecto tuvo “un error” al pagar a los estadounidenses “un bono por no volver a trabajar”.
“Tener las protecciones básicas del seguro de desempleo es extremadamente importante y debe continuarse”.
Según el líder republicano, el error se encontró en una disposición que pagó un beneficio adicional que completaba los salarios ganados antes de que la pandemia detuviera al sector trabajador del país.
En caso de que su ley se apruebe, también dirigirá parte del presupuesto establecido de $3 billones a la protección de empresas, organizaciones sin fines de lucro, escuelas y otras empresas de responsabilidad civil que reabran durante la pandemia.
La Ley CARES se promulgó el 27 de marzo y comenzó a repartir apoyos poco más de dos semanas después, entre el 11 y 12 de abril.
Para finales de junio ya se habían repartido la mayoría de las verificaciones de estímulo.
Una estimación del Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara de Representantes señala que tomará al menos 20 semanas para que se envíe la totalidad de pagos postales.
Cuando los demócratas del Congreso emitieron su proyecto bajo el nombre de Ley HEROES para los segundos pagos, se pensaba que para julio ya se tendría una resolución y por consecuencia se comenzarían a repartir los cheques, no obstante, el Senado estancó la legislación creando una gran variedad de ayudas, por lo que se descartó una fecha próxima para emitir los pagos.
Se cree que si el Congreso llega a aprobar una de las múltiples propuestas a inicios de agosto, la segunda roda de pagos se emitirán en la segunda mitad del mes y se extenderán hasta Navidad.
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