Negocios

Restaurante de indocumentada mexicana, entre los mejores de EU

Una mujer que llegó a Estados Unidos como indocumentada estableció su negocio que acaba de recibir la distinción de una revista especializada

19/12/2016 |07:03EFE |
Vive USA
RedacciónVer perfil

El restaurante South Philly Barbacoa de Filadelfia, perteneciente a una migrante indocumentada de México, es considerado uno de los nuevos mejores restaurantes de 2016 en Estados Unidos.

De acuerdo con la revista gastronómica Bon Appétit, la barbacoa, los tacos y el consomé que sirve Cristina Martínez en su restaurante son una de las diez comidas más sabrosas del país estadounidense en este último año. South Philly Barbacoa es el sexto mejor nuevo restaurante del país.

Cristina, chef de profesión, llegó a Filadelfia, Pensilvania, en 2006 para trabajar y ayudar económicamente a su familia en México durante un año, aunque se vio obligada a volver en 2009 para quedarse.

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En entrevista con la agencia EFE, la chef dijo que tuvo que atravesar el desierto, beber agua sucia, dormir en el frío y caminar bajo la lluvia, para volver a la ciudad que había descubierto años atrás.

Martínez aprendió el oficio de cocinar barbacoa de sus padres en Capula, Estado de México, y supo ver la necesidad de su entonces nueva ciudad de proveer de comida y de café a los trabajadores que salían de sus casas a las cuatro de la madrugada.

El restaurante está decorado con coloridos mosaicos y arte autóctono mexicano que consiguen transportar al comensal a una taquería en lo más profundo de México. El establecimiento sólo opera los fines de semana, cuando tradicionalmente las familias comen el plato estrella del negocio, la barbacoa.

La dueña de South Philly Barbacoa trabajó en un restaurante italiano de la ciudad, a pesar de la barrera del idioma, en donde consiguió convertirse en pastelera. Sin embargo, su condición de indocumentada le llevó a perder su empleo y a comenzar a cocinar la barbacoa, mientras lo compatibilizaba con otro trabajo durante los primeros meses.

A mediados de 2015, la mexicana abrió su restaurante gracias a la generosidad de un amigo que le prestó el local, aunque después continuó el negocio en un carrito de comida por las calles y luego logró contar con espacio propio.

Actualmente, la migrante mexicana indocumentada está casada con un estadounidense, pero obtener su residencia permanente necesita realizar todo el trámite y regresar a México.