Junto a la aprobación de la Ley CARES en marzo pasado, el gobierno autorizó un presupuesto de ayuda financiera dirigido a pequeñas empresas, otorgando préstamos para pagar salarios y otros gastos durante la pandemia por coronavirus a través del Programa de Protección de Cheques de Pago (PPP por sus siglas en inglés).
En inglés Paycheck Protection Program, consta de un paquete de ayuda de $660 mil millones de dólares destinado a proporcionar ocho semanas de asistencia de flujo de efectivo a pequeñas empresas con préstamos garantizados por el gobierno federal.
Los préstamos son repartidos por la Administración de Pequeñas Empresas (SBA) y pueden ser cancelados o perdonados, siempre y cuando se cumpla con los criterios de retención de los empleados y los fondos se utilicen para gastos exclusivos de la empresa.
Las empresas prestatarias elegibles son aquellas que tienen hasta 500 empleados y entran en la definición legal y reglamentaria de una “empresa pequeña” establecida en la sección 3 de la SBA.
Incluyen las empresas individuales, contratistas independientes y personas que trabajan por cuenta propia, también conocidos como freelancers que puedan presentar las declaraciones de impuestos de nómina al Servicio de Impuestos Internos (IRS por sus siglas en inglés).
El préstamo cubre los gastos durante las 24 semanas posteriores de la fecha de inicio del préstamo.
Hasta el momento se han repartido $4.9 millones en préstamos con montos promedios de $105 mil 328 dólares por empresa, según estiman la SBA y el Departamento del Tesoro.
Un préstamo PPP puede ser perdonado si la compañía beneficiaria ha gastado al menos el 60 por ciento de la ayuda en costos de nómina de sus empleados hasta por ocho semanas después de obtener el apoyo y el 40 por ciento restante lo ha destinado para pagos de hipotecas, alquileres o servicios públicos.
Según el Departamento del Tesoro, se autorizará el perdón del apoyo si la empresa emite la Solicitud de Perdón de Préstamo PPP ante el prestamista privado que aprobó la ayuda.
Los cheques de ayuda emitidos antes del 5 de junio tienen hasta dos años en ser recuperadas por el gobierno, mientras que las que estaban siendo emitidas después de dicha fecha tienen hasta cinco años con 1 por ciento de interés.
El Senado aprobó la extensión de la fecha límite para solicitar el programa hasta el 8 de agosto de 2020, se tenía previsto terminar los beneficios del programa el pasado 30 de junio.
No se descarta que la Cámara apruebe otra extensión para el plazo de solicitud.
La solicitud requiere las siguientes verificaciones:
1. La empresa debe comprobar que necesita el préstamo para respaldar sus operaciones en curso.
2. Los fondos deben usarse para retener a los trabajadores y mantener sus nóminas cubiertas, así como hipotecas, servicios públicos y alquileres.
3. Que la empresa no reciba ayudas ni préstamos similares en el momento de solicitar el PPP.
4. La compañía debe proporcionar datos sobre el número de empleados equivalentes a tiempo completo en la nómina, montos de los costos de la nómina, pagos de intereses de hipotecas, pagos de alquiler y de servicios públicos cubiertos durante las ocho semanas posteriores a la obtención del préstamo.
La solicitud se hace por medio del formulario Paycheck Protection Program Borrower Application Form y se presenta ante el prestamista participante de la SBA.
Consulta en este enlace la lista de los prestamistas.