El Acta de Cuidado de Salud, también conocido como Obamacare se firmó en el año 2010 y desde el principio el país se dividió entre quienes lo apoyan y quienes lo odian.
De acuerdo con una encuesta de Kaiser Family Foundation al mes de noviembre de 2017, el 50% de los encuestados lo encontraban favorable contra 46% que lo detestan y desean que sea anulado.
A que partido pertenece el encuestado influye en su respuesta, según esta encuesta, pues mientras que 80% de los demócratas lo aprueban 81% de los republicanos lo repudian.
Cada candidato republicano a puesto de elección popular ha usado como bandera el repudio del programa de salud del ex mandatario, incluido por supuesto, el actual presidente republicano Donald Trump.
Al centro del rechazo del programa de salud esta el hecho de que todo estadounidense tiene la obligación de adquirir un seguro de salud o pagar una multa en impuestos, esta es la medida mas antipopular entre los republicanos.
Desde el implemento de la ley, mas de 20 millones de estadounidenses que no contaban con un seguro de salud, ahora lo tienen.
La ley es confusa para muchos, y algunos de los que se oponen al programa lo hacen con base en el nombre con que la Ley de Salud fue rebautizada, Obamacare, una referencia directa al ex presidente, como quedo demostrado en el show de Jimmy Kimmel en donde se le preguntó a gente en las calles, cual de los dos programas preferirían, y muchos optaron por La ley de Salud ignorando que era la misma.
Mientras que la ley ha beneficiado a millones también ha afectado a otros, por ejemplo, los individuos en buen estado de salud quienes no tenían un seguro medico y han sido obligados a adquirirlo han visto en los últimos anos subir los precios de “un servicio” que no usan.
También se han visto afectados aquellos cuyos ingresos apenas sobrepasan el monto requerido por la ley para recibir ayuda para comprar el seguro y que por consiguiente tienen que desembolsar todo el monto, resultando en una carga económica muy pesada para algunas familias.
Y por último otros que detestan al programa son aquellos que tuvieron que renunciar a sus antiguas pólizas porque sus doctores y hospitales no se encontraban dentro de la red de sus nuevos seguros.