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El empresario Bill Gates ha sido el estadounidense más rico y uno de los máximos magnates durante las últimas dos décadas, mismas en las que también se ha convertido en uno de los filántropos más generosos, lo cual acaba de confirmar con la donación del total de su fortuna, aunque eso implique no heredarla a sus hijos.
De acuerdo con la revista Forbes, la fortuna del cofundador de Microsoft asciende a 70 mil millones de dólares, razón por la que es el hombre más rico del mundo en la actualidad. Desde hace varios años, el magnate decidió donar toda su fortuna a la caridad cuando muera, lo cual confirmó esta misma semana.
En una entrevista en el programa de televisión británico This Morning, según el diario The Daily Mail, Gates, de 60 años, dijo que sus hijos se sienten orgullosos de su decisión de donar el dinero a los más pobres e, incluso, indicó que en lugar de crear fondos fiduciarios mil millonarios para sus hijos, se les dará una “gran educación” para impulsarlos en sus carreras y vidas.
El magnate aseguró, sin embargo, que sus hijos siempre tendrán cierta comodidad económica para llevar a cabo sus planes de vida. “Nuestros hijos recibirán una educación excelente y algo de dinero para ayudarlos”, mencionó el dueño de Microsoft en la emisión televisiva.
“No le haces un favor a los niños cuando le das grandes sumas de dinero. Distorsionas cualquier cosa que puedan hacer en sus carreras”, explicó Bill Gates.
Una vez que muera, la fortuna del fundador de Microsoft pasará a la Fundación Bill y Melinda Gates, que se encargará de financiar proyectos de salud y educación en todo el mundo.
“El dinero será dedicado para ayudar a los pobres. Mis hijos saben eso y están orgullosos de la decisión. Los llevamos en algunos viajes con nosotros para que vean todo lo que se está haciendo”, dijo Gates.
De acuerdo con varios medios de comunicación, el empresario Bill Gates y su esposa Melinda tienen tres hijos: Jennifer, de 20 años de edad; Rory, de 17; y Phoebe, de 14.
Jennifer estudia su segundo año en la Universidad Stanford, en California, donde su padre donó la suma de 6 millones de dólares para la construcción de un edificio de informática que lleva su nombre.
Por su parte, los hijos más chicos del empresario, Rory y Phoebe, viven con sus padres en Seattle, Washington, en donde asisten al colegio.
