Después de llegar a la Unión Americana como migrante indocumentada y sin saber inglés, la empresaria mexicana Victoria Lara es conocida por ser la única latina dueña de una agencia de marketing en la costa noroeste de Estados Unidos.
Victoria Lara es originaria de Chihuahua y pasó los primeros años en el vecino país como cualquier migrante que decide dejar su país para buscar el llamado “sueño americano”. Aunque ya contaba con una empresa con la cual combinaba las relaciones públicas con la agencia de viajes, quería aprender inglés para relacionarse mejor con los clientes.
"Quería aprender inglés, entonces me vengo a Estados Unidos sin conocer a nadie, sin tener dinero; venía con una amiga, pero en la cruzada la detienen a ella, la esposan y se van", narró en entrevista con la agencia Notimex.
Sin contactos y con sólo 22 años de edad llegó a Denver y después se trasladó a otras ciudades. “Trabajando como cualquier inmigrante, llegué a lavar pisos, ponía inyecciones, cortaba el cabello, trataba de trabajar bien duro, pero siempre mi meta fue salir adelante".
Asimismo, la empresaria que actualmente vive en Portland, Oregon, contó una anécdota que demuestra que su objetivo siempre estuvo claro: "Una vez un señor, un americano me dijo: ¿usted viene a pedir trabajo? Le respondí: no, yo vengo a dar trabajo”.
Lara estudió Administración de Empresas en México y en Estados Unidos tomó diversos cursos sobre storytelling, cultura y responsabilidad, los cuales le permitieron abrir la compañía “Lara Media”, empresa de servicios de comunicación y divulgación para conectar a la comunidad latina.
"Mi primer empleado fue un güerito. De hecho, he tenido trabajadores de todos los países. Cuando los contrato les digo que esto no sólo es una agencia de publicidad, sino donde el mensaje y el trabajo que hacemos salva vidas, porque las traducciones que hacemos pueden ayudar a nuestra comunidad latina”, comentó.
Lara Media ha tenido contratos millonarios y producciones de comerciales de cinco millones de dólares. La mexicana es líder comunitaria y defensora de los derechos civiles desde hace más de una década, por lo que fue galardonada con el reconocimiento como destinatario de Dreamer Americano en diciembre de 2013 y el de Campeón de Pequeños Negocios, en mayo de 2014.