Los usuarios de los servicios de correo electrónico generalmente mandan mensajes con la seguridad de que cuentan con privacidad, pero esta semana se dio a conocer que Gmail supuestamente permite que desarrolladores web externos tengan acceso a las bandejas de entrada con fines comerciales.
De acuerdo con The Wall Street Journal, los usuarios con mayor riesgo de intromisiones en sus cuentas de e-mail fueron los que se suscribieron a servicios de comparaciones de precios de compras y planificadores de viajes de forma automática.
Tras la polémica que generó la revelación, Google confirmó que permite que otras aplicaciones tengan acceso a los correos de electrónicos de sus clientes pero aseguró que cuenta con estrictas medidas de seguridad para ello.
A través de una publicación en su blog oficial, Google indicó que investiga contínuamente a los desarrolladores que se integran a Gmail para poder darles acceso a sus usuarios.
Explicó que primero se realiza una revisión automática y luego una manual en su política de privacidad y su legitimidad.
Asegura que todas las aplicaciones externas con estos permisos deben aclarar a Google el uso que le dan a los datos que obtienen y sólo pueden solicitar información para funciones específicas.
Además, asegura que antes de ceder permisos a aplicaciones externas a Google se muestra a los usuarios una pantalla en la que se desglosa el tipo de información a la que podrían acceder.
La directora de Seguridad, confianza y privacidad de Google Cloud, Suzzane Frey, aclaró en el blog que Google no lee ninguno de los correos electrónicos de sus clientes.
Si quieres revocar los permisos que aplicaciones externas tienen en tu correo electrónico puede entrar a la página de Security Checkup.