Recientes datos señalan que los millennials, en especial los más acaudalados o dentro de una estabilidad económica considerable, están basando sus hábitos de vida al sector del lujo.
De acuerdo con datos de Business Insider, los jóvenes del milenio invierten su capital en experiencias personalizadas, con costos extras, influenciados por el auge de las redes sociales, moda y el deseo de alcanzar un estatus social elevado.
Los jóvenes crean tendencias y “símbolos de estado” basados en productos caros como ropa y zapatos, principalmente, a la vez que desplazan la industria de revistas de moda al convertirse en ‘influencers’.
Por su parte, el sitio web apunta que servicios de alquiler como Rent the Runway han hecho que las propiedades de lujo sean más accesibles para otro tipo de personas, debido a que los millennials apuestan por la “economía de bienes”.
La experta Larissa Faw escribió en Forbes que los todos los milenarios gastan en experiencias en lugar de objetos, pero algunos prefieren agregar mejoras sin importar el precio.
Pagan más por comodidades o servicios durante las experiencias para mejorar su estilo de vida y aumentar su anhelado estatus, en comparación con jóvenes de la misma generación que sólo viven la experiencia.
“Por ejemplo, los millennials, independientemente de su estatus socioeconómico, asisten al festival de música Bonnaroo, pero mientras que los huéspedes no acomodados se quedan en tiendas básicas y usan duchas comunitarias, los millennials más ricos pagan por experiencia VIP con un chef privado gourment y un chofer de golf-cart service”.
Larissa señala que por estas nuevas tendencias, festivales y conciertos trabajan para desarrollar programas exclusivos para que los usuarios no sólo inviertan en la experiencia, sino en algo más.
Otro de los ejemplos que señala la experta es “Los millennials pueden festejar en el mismo club nocturno, pero sólo los más ricos son escoltados más allá de la cuerda de terciopelo a una sección separada, a menudo elevada”.
En cuanto a los objetos físicos, los millennials atraen la moda urbana al mercado de lujo para, posteriormente, utilizar Instagram como medio de difusión de su estatus, e incluso ganar dinero por dichas vías.
“La alta estética del ‘streetwear’ permite que la tendencia haga ruido en las redes sociales. Y a medida que los compradores más jóvenes están empezando a favorecer la singularidad sobre la artesanía, se va el deseo por el lujo tradicional”, apunta Jesica Sulima de Adweek.
“A medida que las casas de alta moda se aprovechan cada vez más de esta tendencia creciente de las redes sociales, la moda urbana ocupa un espacio más grande dentro de los niveles superiores de estilo”.
Un ejemplo de ello es la relación que creó Gucci con diseños urbanos, influencia de la cultura popular y desplazamiento de prendas elegantes y exclusivas a partir de 2015, cuando la firma de alta costura nombró a Alessandro Michele como director creativo de la empresa.
En la galería te dejamos con otras formas que utilizan los millennials acaudalados para redefinir el lujo.