En apenas 10 años Hamdi Ulukaya ha cambiado el desayuno de los estadounidenses con un producto inspirado en una receta de su madre, yogurt estilo griego y con ello se ha convertido también en millonario.
Ulukaya, hoy de apenas 44 años, llegó a Estados Unidos a los 22 años, un país en el que no tenía familia, conexiones y con muy poco dinero.
Entonces decidió arriesgarse a comprar una planta procesadora de yogurt que la compaña Kraft estaba cerrando en el estado de Nueva York y obteniendo un préstamo la compró para producir un yogurt que pocos conocían hasta entonces basándose en una receta del que hacía su madre cuando era él niño en su pueblo natal en Turquía.
En 10 años el consumo de yogurt estilo griego paso del 1% al 52% y la marca Chobani, creada por Ulukaya es la líder en este mercado.
Desde el principio el ahora millonario estableció buenos salarios a sus empleados, pues creía que las compañías tienen más éxito cuando cuentan con empleados bien pagados que se sienten moralmente comprometidos con la empresa.
Cuando la Casa Blanca anunció la implementación de una restricción de viaje a personas de varios países musulmanes, Ulukaya expresó que el “Travel Ban” como se le conoce, lo tomaba como personal.
“Estados Unidos ha sido siempre símbolo de esperanza, tolerancia y diversidad y debemos trabajar para mantener esos valores” afirmó a CNN Money.
La planta de yogurt Chobani en Nueva York emplea a más de 2 mil empleados, a los que el millonario expresó su solidaridad, su alguno resultaba afectado por la prohibición de viaje y prometió que se les ofrecería toda la ayuda legal.
Y yendo en contra de las políticas de restricción de refugiados, la planta de yogurt emplea a cientos de refugiados, de quienes Ulukaya dice son los más talentosos y dedicados que jamás conoció.
“En Chobani hay trabajadores de 19 países diferentes, somos un microcosmos de los mejor de Estados Unidos” dijo el millonario.