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Tras haber hecho público su divorcio, Melinda y Bill Gates han estado bajo el escrutinio mediático y durante este tiempo se han ido revelando secretos de su matrimonio que demuestran que nunca fue tan perfecto como todos creían.
Y es que, además de que Bill Gates llegó a un acuerdo con Melinda sobre dejarlo salir con su exnovia poco después de casarse y de los vínculos que tuvo éste con Jeffrey Epstein, hubo otras cosas que deterioraron su relación.
Una de ellas fue su matrimonio de 27 años “sin amor” uno por el otro.
De acuerdo con una fuente cercana, el magnate le reveló a sus amigos más cercanos del golf que en su matrimonio nunca, desde que inició y hasta el momento de su separación, hubo amor.
“Bill habló con sus amigos cercanos en el campo de golf. Él les dijo hace un tiempo que el matrimonio fue sin amor, que había terminado por por algún tiempo y que estaban viviendo vidas separadas”, le dijo la fuente al New York Post.
Al momento del anuncio de su separación, Bill se encontraba en su mansión de $12.5 millones de dólares en The Vintage Club en Indian Wells, California; llevaba allí al menos tres meses viviendo solo.
Según los informes, el lugar se trata de uno de los clubes más prestigiosos de Estados Unidos, sin embargo, el empresario ha puesto de lado su hobbie favorito desde hace un año.
La fuente cercana a los Gates también le dijo al medio neoyorquino que la decisión de divorciarse fue difícil de tomar para Melinda debido a sus creencias religiosas, pero su molestia y decepción por la amistad entre Bill y Epstein, acusado de múltiples abusos sexuales, fue más fuerte,
“Y cualquier amistad con Epstein habría sido la manzana de la discordia para Melinda. No hay forma de que Melinda hubiera querido pasar tiempo con Epstein”, señaló la fuente.
“Ella quiere obtener una anulación del Vaticano luego del divorcio civil”, añadió la fuente que había trabajado con Melinda.
Esta revelación apoya un artículo publicado por The New York Times sobre el lenguaje corporal de Melinda en eventos a los que asistía o compartía escenario con Bill, mismo que demostró su infelicidad arrastrada por años.
“Una persona que la conoce bien, pero habló bajo condición de anonimato sobre un asunto familiar tan privado, dijo que cualquiera que vea su lenguaje corporal en los eventos de Giving Pledge, podía ver que ella está infeliz”, dijo The Times.
A pesar de sus diferencias y aparente falta de afecto, los Gates mantuvieron un matrimonio de 27 años. Esperaron a que su hija menor, Phoebe Adele, cumpliera 18 años para anunciar de forma oficial el divorcio en el que habían trabajado desde 2019.
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