Este martes se realizan las elecciones presidenciales de Estados Unidos, uno de los procesos electorales más complejos, largos y, por consiguiente, uno de los más costosos en el planeta, por no decir el que más presupuesto utiliza.
De acuerdo con estimaciones del Centro para Políticas Responsables (CRP, por sus siglas en inglés), una ONG que hace seguimiento al financiamiento de la política en Estados Unidos, la actual campaña presidencial estadounidense costará alrededor de 2 millones 651 mil dólares.
Dicha cantidad, según el sitio de la cadena BBC, se basa en la información recopilada por la Comisión Federal Electoral y equivale a un gasto promedio de 11.67 dólares por cada uno de los 227 millones de estadounidenses que tienen edad de votar, de acuerdo con la Oficina del Censo de Estados Unidos.
La proyección es ligeramente superior a los 2 millones 621 mil dólares que costó la carrera presidencial de 2012, en la que el presidente Barack Obama logró la reelección ante el candidato republicano Mitt Romney.
Actualmente, de acuerdo con las cifras del CRP, la campaña de la candidata presidencial demócrata, Hillary Clinton, había recibido hasta el 31 de octubre cerca de 687 millones, lo que la ubica unos 34 millones por abao de los 721 millones recaudados en 2012 por Obama.
En el caso de Donald Trump, la campaña ha recaudado alrededor de 307 millones de dólares, casi 150 millones menos que los conseguidos en 2012 por el equipo de Romney.
Una parte importante de recursos económicos entran en juego a través de los Comités de Acción Política (PAC), que son organizaciones creadas para recolectar fondos que luego son usados para hacer campaña a favor de algún candidato.
Además existen los SuperPAC’s que deben ser "independientes" y no pueden donar sus fondos a una campaña o a un partido en concreto, pero a cambio no tienen límite en la cantidad de fondos que pueden recaudar y utilizar para influenciar en el resultado electoral.
De acuerdo con el CPR, en la actual carrera presidencial hay 2 mil 368 SuperPACs registrados ante la Comisión Federal Electoral (FEC, por sus siglas en inglés). Hasta el pasado 2 de noviembre, estos grupos habían gastado al menos 980 millones de dólares en el actual ciclo electoral.