A mediados de año se anunció un nuevo apoyo económico para ayudar a las familias estadounidenses afectadas por el aumento de precios de servicios básicos debido a la crisis económica que trajo consigo la pandemia.
Varios gobiernos estatales de Estados Unidos impulsaron cheques de estímulo similares a los enviados durante la emergencia sanitaria para hacer frente a la alza de precios y apoyar los bajos salarios.
Estados como California, Florida, Delaware, Hawái, Illinois, Idaho y Pensilvania, por mencionar algunos, iniciaron con los planes para enviar cheques de estímulo para la inflación; rumbo a fin de año, sus respectivos gobiernos ya están lanzando las últimas rondas programadas para 2022.
Para la primera quincena de diciembre, California ya envió aproximadamente 14 millones de pagos, entre envíos de tarjetas prepagadas y depósitos directos, pero todavía falta otorgar una última ronda.
Las personas que faltan por recibir su pago son aquellas que:
- Contribuyentes con primeros apellidos que se encuentren entre las letras L y Z.
- Hicieron su declaración de impuestos de 2020
-Recibieron su reembolso de impuestos de 2020 por un cheque
- No fueron beneficiarios del Estímulo del Estado Dorado
Los pagos comenzarán a enviarse a partir de este 19 de diciembre y pueden tardar todavía hasta dos semanas en llegar, destaca la Junta de Impuestos de Franquicia de California (FTB en inglés).
El gobernador Gavin Newsom y los legisladores estatales repartirán el cheque de estímulo con un valor de hasta $1050 dólares, que apoyará a sus recientes con los gastos básicos del hogar, desde pagos de alquiler, hasta alimentos y pago de facturas de servicios públicos.
Los cheques de alivio a la inflación pertenecen al paquete de ayuda estatal de $17 mil millones de dólares que, además, suspenderá el impuesto estatal sobre las ventas de combustible diesel y dará ayuda adicional para gastos de alquiler.
El dinero es un cúmulo seleccionado del superávit presupuestario que se repartirá como reembolso de impuestos.