Para Bill Gates, el éxito radica en marcar la diferencia: inventar algo, criar niños o ayudar a personas necesitadas. Por supuesto, el empresario lo ha logrado todo.
A los 20 años, cofundó<span ><strong> Microsoft </strong></span>con su amigo de la infancia Paul Allen. Antes de cumplir 31, empezó a ganar millones de dólares.
Aunque no está todo el día en la oficina, Bill Gates piensa en el trabajo casi todo el tiempo. Así lo confiesa en la serie documental Inside Bill’s Brain, disponible en Netflix.
Presentó su renuncia como miembro de la junta directiva de Microsoft y actualmente se dedica por completo a su fundación benéfica Bill y Melinda Gates, dirigida principalmente a esfuerzos de salud y vacunas.
Tiene 64 años y es el segundo hombre más rico del mundo con una fortuna de $104.6 mil millones de dólares, pero, a pesar de tener la “vida resuelta”, su rutina diaria no es sencilla.
Antes de la pandemia por coronavirus, su agenda era ocupada. Acá un vistazo.
El desayuno tiene fama de ser la comida más importante del día, pero Bill Gates no lo toma así. Tras despertar, bebe una taza de Cocoa. Come ligero o simplemente se salta el desayuno, reveló su esposa Melinda Gates a estudiantes de Betsy Layne High School.
Es un hombre informado. Mientras desayuna lee los titulares y noticias de los principales diarios estadounidenses. De hecho, un reportaje publicado en The New York Times lo llevó a tomar acciones para erradicar la polio en África. Aunque la enfermedad no tiene cura, puede prevenirse y hace campañas de vacunación mediante su fundación.
También consulta The Wall Street Journal y The Economist.
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Aunque antes Bill Gates partía de inmediato a su oficina cuando trabajaba en Microsoft, ahora se toma más tiempo antes de ir a la fundación. Le gusta iniciar el día dando un paseo a los alrededores de su mansión en Washington.
Sostiene que una caminata rodeado de árboles y naturaleza le ayuda a pensar.
Prefiere ejercitarse durante las mañanas. Si no da un paseo al aire libre, se ejercita en la caminadora mientras ve algún documental. También ama jugar tenis.
Bill Gates es, ante todo, un devorador de libros. Si tiene alguna idea o pensamiento, va a su enorme biblioteca a nutrirse de bibliografía. Consulta libros y páginas de internet hasta que está satisfecho con la información que encontró o busca más. Hace esto casi todos los días.
En verano e invierno publica una lista de libros que recomienda en su blog. Te sorprenderá saber que no se encasilla en temas de ciencia, tecnología o salud. También lee novelas y ama los libros de historia.
Su miedo más grande es la muerte cerebral, que algún día su cerebro deje de pensar.
Al mediodía, el empresario visita las oficinas de su fundación para sostener reuniones de alto nivel o reunirse con personas que lo inspiran. Durante el confinamiento ha tenido que hacer sus meetings desde casa. Pero antes asistía a eventos o trabajaba en su oficina durante la tarde.
A la hora del almuerzo, Bill Gates prefiere las hamburguesas sobre cualquier otra comida. Por supuesto, no las come diario, pero sí procura consentirse.
Después de trabajar, Bill Gates pasa tiempo con su familia. Melinda Gates dijo a The Cut que ella, Bill y su hija Phoebe tratan de cenar juntos tan a menudo como pueden, generalmente a las 6:00 o 7:00 p.m.
“La cena suele ser una mezcla de lo que Phoebe, Bill y yo nos guste, desde comida mexicana hasta asiática, pasando por cenas de carne o pescado”, dijo.
Los fines de semana se relajan con partidas de tenis o bridge.
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En 2014, Bill Gates confesó en Reddit que su rutina nocturna incluye lavar los platos de la cena. “Otras personas son voluntarias, pero me gusta la forma en la que lo hago”, señaló.
Un estudio de la Universidad Estatal de Florida señala que esta tarea puede disminuir los niveles de estrés, pues las personas se concentran en la sensación del agua tibia, el olor del jabón y el tacto. Incluso puede inspirar nuevas ideas.
Melinda Gates también reveló a The Cut que se acuestan a las 9:30 p.m., pero terminan durmiendo cerca de las 10:30 p.m. A ambos les gusta ir a dormir temprano para despertar con energía al día siguiente.
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