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Aunque la mayor parte de los factores son negativos para los mexicanos, el fortalecimiento del dólar frente al peso ha tenido un efecto progresivo en el envío de remesas de Estados Unidos a México y en la distribución del ingreso de las familias, durante el primer semestre del 2015.

Este lunes, el dólar registró un máximo histórico pues se vendió hasta en 16.77 pesos en operaciones en ventanilla, indicaron datos de Bancomer y Banamex, que publicó El Universal. La moneda estadounidense subió por segunda semana consecutiva, al acabar igualando el pasado viernes el récord histórico de 16.70.

El envío de remesas de Estados Unidos a México es un fenómeno derivado de la migración de ciudadanos mexicanos a su país vecino en busca de mejores condiciones de vida debido a una problemática social histórica: altas tasas de desempleo, pérdida de productividad y calidad de vida en el campo, centralización de desarrollo en las ciudades y constantes procesos inflacionarios.

Durante el primer semestre de 2015, según datos del Banco de México, ingresaron al país 12 mil 088 millones de dólares, una cifra superior en 4% al mismo periodo del año pasado y que marca la cantidad más elevada desde 2008. El capital se aportó, en su mayoría, a través de transferencias electrónicas, equivalentes a 11 mil 626 millones de dólares.

Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) arrojan que los trabajadores mexicanos que viven en Estados Unidos enviaron en promedio 294 dólares vía electrónica, mientras que en efectivo y especie el promedio fue de 440 dólares.

En perspectiva

Para ilustrar el impacto del alza del dólar y su beneficio entre quienes reciben remesas se puede considerar un sencillo ejercicio: comparar los datos disponibles de la Secretaría de Economía entre el tipo de cambio vigente y el del año pasado.

Por ejemplo si alguien recibió 100 dólares el 17 de agosto de 2014, esa cantidad habría equivalido a 1,307 pesos -en esa el dólar se cotizó en 13.07 pesos; si esa misma cifra se hubiera recibido ayer habrían representado 1,677 pesos; las cantidades se vuelven exponenciales si aumentan las cantidades.

La , dada a conocer a principios de este mes, señala que alrededor de 1.3 millones de hogares mexicanos reciben este tipo de ingresos. Dicho documento indica que del total de casas que reciben este tipo de recursos económicos, un 65% corresponde al 50% de las familias de menores ingresos.

Según la ENIGH, en el segundo trimestre de 2015, entre abril y junio, las remesas fueron equivalentes a 6 mil 365 millones de dólares, lo que significa, un aumento de 3.22% respecto al mismo periodo del año anterior.

De este modo, según el documento del INEGI, la depreciación del peso frente al dólar tiene un efecto progresivo en la distribución del ingreso de las familias mexicanas. La Encuesta Ingreso Gasto de los Hogares 2013, la anterior, indica que la negociación diaria en pesos ascendió al equivalente de 135 mil millones de dólares diarios.

De acuerdo con datos del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial citados en el estudio del INEGI, México es el cuarto mayor receptor de remesas, con 25 mil millones de dólares en 2014 y sólo lo superaron India, China y Filipinas.

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