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Aun si te encanta tu trabajo, amas a tu jefe y no te imaginas trabajando en otro lado, la verdad es que todos trabajamos para obtener un ingreso, y entre mayor sea este mejor.
No se trata de llegar y exigir, sino de saber negociar. Evidentemente en tu empresa como en todas las demás la meta es generar dinero, la mayor cantidad de ganancia con la menor cantidad de gastos posibles.
De acuerdo con el Buró de Estadísticas Laborares de Estados Unidos, la nómina llega a representar hasta el 70% de los gastos de algunas empresas, por lo que te imaginarás que darte un aumento no siempre sucederá “mágicamente.
Hay algunas cosas que definitivamente debes observar para elegir el momento de acercarte al jefe y pedir tu aumento, por ejemplo, nunca lo hagas en un momento de alta tensión, tampoco uses información acerca del salario de alguno de tus colegas, ni amenaces con renunciar si no lo obtienes.
Es importante que conozcas el valor de tu posición y que ten difícil será remplazarte, explora el mercado, infórmate del salario promedio y lleva contigo todas las aportaciones que haces con tu trabajo, en caso de que las necesites. Recuerda que vas a negociar y por lo tanto tiene que quedar muy claro porque mereces un cheque más grande a la quincena.
Tampoco asaltes al jefe en el pasillo, pide una reunión y adelántale que deseas discutir tus ingresos. Tu salario no es un botín que se deba arrebatar, es la justa compensación por tu trabajo. Dale oportunidad de que se prepare para responderte.
En la siguiente galería te compartimos 7 estrategias que puedes usar para obtener un aumento de sueldo.
