Numerosas universidades estadounidenses mostraron hoy su rechazo a la decisión del presidente, Donald Trump, de acabar con el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), que en los últimos cinco años ha evitado la deportación de 800.000 jóvenes indocumentados.
Harvard aprovechó el comunicado para renovar su "fuerte compromiso" con todos los alumnos que puedan verse afectados por la medida y anunció la contratación de un abogado que ofrecerá asesoramiento legal a todos aquellos estudiantes que lo necesiten.
La Universidad de Stanford (California) se expresó en similares términos y anunció que continuará trabajando "sin descanso" en pro de una reforma de las leyes migratorias que les permita seguir recibiendo "estudiantes, empleados y académicos que refuercen el compromiso educativo" de la institución.
La cancelación del programa no entrará en vigor hasta el próximo 5 de marzo, lo que dará seis meses al Congreso para encontrar una solución para regularizar la situación de los jóvenes indocumentados afectados por la medida, popularmente conocidos como "soñadores".