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Rodong Sinming, el periódico del régimen de Corea del Norte anunció entre sus páginas lo que supondría una advertencia de ataque nuclear en la ciudad de Nueva York, la más poblada de todo Estados Unidos, en respuesta a un tuit que Donald Trump lanzó días antes de asumir la Presidencia del país, a principios de 2017.
El medio estadounidense Newsweek tomó parte de la información redactada en el diario norcoreano en el que se advierte que la distancia entre Corea del Norte y Nueva York “no es una distancia tan larga para un bombardeo hoy en día”.
Dicha advertencia es una clara respuesta al comentario hecho por Donald Trump en Twitter el pasado 2 de enero, cuando escribió: “Corea del Norte acaba de afirmar que está en las etapas finales de desarrollar un arma nuclear capaz de llegar a partes de los EE.UU. ¡No va a suceder!”.
La respuesta de la nación dirigida por Kim Yong-Un fue contundente, dando espacio a una amenaza de destrucción toda vez que con cálculos exactos se explicó que ambas naciones están separadas por unos 10.400 kilómetros, lo cual sería posible alcanzar con un misil intercontinental.
"Trump se jactó a comienzos de año afirmando que el acceso final de la República Democrática de Corea del Norte a las armas nucleares que puedan alcanzar el continente de Estados Unidos nunca ocurrirá. Sin embrago, las pruebas de las armas estratégicas realizadas por Corea del Norte han demostrado claramente que el tiempo de la prueba de misil balístico intercontinental no es en absoluto muy lejano", se explicó en el Rodong Sinming de acuerdo con lo retomado por Newsweek.
A principios de año, el líder norcoreano Kim Yong-Un anunció que su país estaba en las etapas finales del desarrollo de un misil balístico intercontinental capaz de transportar una cabeza nuclear.
En el mes de abril pasado, la ciudades de Nueva York y Nueva Jersey realizaron un ejercicio conjunto liderado por la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias de Estados Unidos en el que se simulaba la respuesta de emergencia ante un ataque a gran escala. El ejercicio se llamó "Gotham Shield" y se involucraron agencias federales, equipos locales de manejo de emergencias y médicos.
