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Deborah Berebichez tiene un doctorado en Física Teórica por la Universidad de Stanford, una de las universidades de mayor prestigio en Estados Unidos y el mundo, dos posdoctorados, uno en la Universidad de Nueva York y otro en Columbia, además de experiencia en el modelaje.

Aficionada de la actuación y poseedora de una belleza natural, a los 18 años, cuando estaba por terminar la preparatoria, empezó a estudiar arte dramático e incursionar en el modelaje. Después ingresó a la carrera de folosofía en la Universidad Iberoamericana, ya que, según dijo ella misma al sitio del onacyt, era la única disciplina que le ofrecía respuestas acerca del universo, la energía y la materia.

A falta de dos años para concluir su carrera, consiguió una beca a través del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACyT) para terminar sus estudios filosóficos en la Universidad Brandeis, ubicada en Waltham, Massachussetts.

A decir de la revista Forbes, en 1995, la ayuda que recibió de Roopesh, un asistente de origen indio adscrito al Departamento de Astronomía en Brandeis, fue decisiva para que encauzara formalmente su gran interés por la física. El matemático indio detectó sus habilidades y le inculcó conocimientos básicos para ser aceptada en la maestría de Física y aprobar exitosamente todas las asignaturas, en un tiempo récord de dos años.

“Roopesh jamás aceptó un centavo como pago y me dijo que la única manera en la que podía pagarle era que hiciera lo mismo por alguien más”, dice con gran emoción. “Concluí mi licenciatura en Filosofía y me gradué simultáneamente en Física, con honores”, recordó en declaraciones para el sitio del CONACyT.

En 1998, Deborah Berebichez inició sus estudios de maestría y al poco tiempo empezó a colaborar en el Instituto de Física de la UNAM. Una concluida su proceso de grado de maestra, buscó el doctorado y lo consiguió gracias a la beca del CONACyT. Lo cursó en la Universidad de Stanford, en California, una de las de mayor prestigio en el mundo y en la que sería discípula del doctor Steven Chu, quien después sería el sería el Secretario de Energía de Barak Obama.

Laboratorios y pasarelas

Al iniciar su maestría en física, también retomó su incursión en el modelaje dentro de las pasarelas de Masachussetts. “Siempre he sido una persona muy femenina, me gusta la moda, bailar y el teatro, de manera que alternar entre el laboratorio de física y los desfiles de modas fue una experiencia que disfruté bastante”, platicó para el sitio del CONACyT, al tiempo de recordar que utilizó un pseudónimo en su etapa como modelo para no ser cuestionada en ninguno de ambos ámbitos.

Doctorado y aportaciones

La gran oportunidad de estudiar el doctorado se pudo haber visto truncada debido al alto costo de matriculación y manutención de dicha escuela: 30 mil dólares al año. Gracias al CONACyT, la mexicana pudo pagarlo todo.

En 2002, Berebichez concluyó sus estudios de doctorado con una tesis que postuló las bases de propagación de ondas en medios no homogéneos mediante un sistema de comunicación basado en la emisión de ondas de tiempo reversible, llamadas así porque estas tienen la cualidad de recorrer de regreso su camino original, hasta el punto de emisión.

Además de aplicaciones en telecomunicaciones, el sistema que ella desarrolló en su tesis de doctorado tiene aplicaciones potenciales en el área de la salud, para tomografías focalizadas de gran resolución, por ejemplo.

Después de cursar dos postdoctorados en nanotecnología, Berebichez inició en 2006 una activa labor de divulgación científica con la conducción de programas en Discovery Channel y National Geographic, además de conferencias internacionales dirigidas a inspirar y motivar a que mujeres jóvenes se interesen en las ciencias exactas.

Vive USA te comparte una galería de imágenes tomadas del perfil de Instagram de Deborah.

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