Si ya tienes tu cita para sacar el pasaporte mexicano seguro ya estás pensando en la forma de salir lo más presentable posible, pero debes tomar en cuenta la razón por la que no podrás sonreír al momento de la foto.
Hace varios años, los mexicanos se presentaban en los estudios fotográficos para que les tomaran imágenes con características especiales para llevar el día de la cita en las oficinas de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Las fotos que se debían de llevar eran de 4.5 cm x 3.5 cm, con fondo blanco y se tenían que pedir con anticipación para que llegaran a tiempo y se pudieran llevar el día del trámite.
Sin embargo, este paso ya no es necesario. El día en que te presentas en la oficina de trámite del pasaporte te tomarán una foto con la cámara del lugar y se enviará al sistema para que se imprima en tu documento.
Al llegar a la sede de la SRE primero revisarán que lleves todos los documentos necesarios para el trámite, como acta de nacimiento, credencial de elector y el pago de derechos del trámite.
Luego de la revisión de documentos pasarás a otra ventanilla para que corroboren tus datos y te tomen tanto la fotografía como tus datos biométricos.
El día en que te presentes en las oficinas debes ir con un peinado que deje la cara descubierta. Tampoco hay que usar peinados ni ornamentos, como gorros o diademas, que cubran el rostro.
Es necesario que la frente, cabeza, boca y orejas sean visibles, pero sí se permite llevar maquillaje o barba, aunque en algunos casos podría solicitarse a las personas que se desmaquillen, según lo considere el personal que te atiende.
Aunque puedes llegar a las instalaciones del trámite del pasaporte mexicano con lentes, al momento de la toma de la foto te los deberás quitar, aunque sean por temas de enfermedad.
Al momento de la toma de la foto para el pasaporte se pide a las personas que tengan la boca cerrada, que no sonrían ni hagan ningún tipo de pose.
El motivo detrás de la ausencia de la sonrisa es porque esto puede afectar el reconocimiento facial que se hace a través de computadoras.
Al llegar a cualquier país extranjero analizarán tu rostro para corroborar que eres la misma persona que la que se muestra en el documento y la sonrisa podría provocar que te impidan el ingreso a un territorio por problemas de reconocimiento.