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El Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (LAUSD, por sus siglas en inglés) aprobó una iniciativa con la que se negará la entrada a agentes de migración a las escuelas de la ciudad con la intención de dar tranquilidad a padres de familia de que sus hijos estarán seguros dentro de los planteles.
Ante los planes de deportación masiva que anunció el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, las autoridades escolares de Los Ángeles se erigieron como vigilantes de cualquier incidente e invitaron a los padres de familia y estudiantes a denunciar cualquier caso de hostigamiento e intimidación, ante las políticas migratorias de Donald Trump.
“Las escuelas de Los Ángeles continuarán como zona de seguridad para estudiantes que estén indocumentados en este país”, subrayó el resolutivo.
El LAUSD instruyó a miembros de sus planteles escolares a no permitir que agentes de migración ingresen a las instalaciones escolares a menos que su visita sea aprobada por el superintendente escolar y los abogados del distrito.
La Junta Escolar también ratificó que protegerá cualquier información e identidad de sus estudiantes, sus familias, profesores y personal administrativo.
Los integrantes de la junta acordaron firmar una carta enviada al presidente electo Donald Trump en la que subrayan que “los ideales estadunidenses son celebrados en Los Ángeles”.
Durante su campaña electoral, Trump prometió que deportaría a 11 millones de indocumentados, pero en fecha reciente prometió que removería de inmediato a entre dos y tres millones de indocumentados.
Por su parte, la Universidad Estatal de California (CSU) descartó ayudar a deportar estudiantes universitarios indocumentados bajo la administración del futuro presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó el rector Timothy P. White.
El anuncio de White se suma al reporte de que un grupo de estudiantes y docentes de la Universidad del Sur de California recabaron cinco mil firmas para que sus autoridades escolares designen a este “un campus santuario” que ofrezca protección a indocumentados.
“Nuestro centro de enseñanza tiene el compromiso de alentar al aprendizaje y ofrecer un ambiente de bienvenida y seguridad para sus miles de estudiantes incluso quienes llegaron aquí indocumentados”, expresó White.
“La misión del más grande sistema universitario de la nación es dar acceso a la más alta educación y abrazar a la diversidad de sus 470 mil estudiantes”, añadió el titular de la red de universidades públicas más grande del estado y de la nación
La CSU no da seguimiento al estatus migratorio de estudiantes, pero hay un estimado de 10 mil alumnos que recibieron exenciones en el otoño de 2015, a través de la AB540 una ley estatal que permite a estudiantes indocumentados solicitar descuentos en cuotas.
