Durante su más reciente discurso en el Congreso de Estados Unidos, Donald Trump instó a los legisladores a presentar una iniciativa de “opción escolar” que les permitiría a los “jóvenes en situación de desventaja” asistir a una “escuela pública, privada, charter, magnet o religiosa, o ser educados en casa”.
De acuerdo con analistas, el modelo de Trump sobre cómo difundir la opción escolar podría ser el programa de Florida, en donde se utiliza un programa de escuelas privadas a través de los vales. Una de esas escuelas es el St. Andrew Catholic School en Orlando.
Trump mencionó la posibilidad de becas por crédito fiscal como un camino a seguir, dijo Ron Matus. Matus es el director de política y asuntos públicos para Step Up for Students, la organización que administra las donaciones de becas de Florida.
¿Qué son los vales escolares? Los vales proporcionan dinero público a las familias para que los niños puedan asistir a escuelas privadas, incluyendo a escuelas religiosas. Sin embargo, dicho método es controvertido.
En el modelo Trump empresas obtienen exenciones fiscales por donar dinero a organizaciones sin fines de lucro. Esas organizaciones entonces les otorgan becas a los estudiantes para asistir a escuelas privadas o parroquiales.
Muchos detractores creen que empañan o incluso violan la separación de iglesia y estado y se preocupen sobre el uso de fondos públicos sin una reglamentación adecuada.
Por otro lado existen las becas por crédito de impuestos para pagar la matrícula. Les permite a los padres de familia anular una cierta cantidad de impuesto sobre la renta y aplicar ese dinero hacia la matrícula de una escuela privada.
La deducción suele ser mucho menor que el costo de la matrícula, por lo que algunos sostienen que beneficia más a las personas que ya tienen los medios para enviar a sus hijos a esas escuelas.
La beca por crédito de impuestos de Florida funciona así: Las empresas obtienen dólar por dólar en crédito de impuestos por sus contribuciones a las organizaciones sin fines de lucro que ofrecen becas. Dependiendo del tipo de impuesto, puede recibir un crédito de entre 50% al 100% de sus obligaciones fiscales a través del programa.
Los padres de familia solicitan las becas mediante la presentación de recibos de sueldos, declaraciones de impuestos y otros documentos financieros. Si son elegibles, puede obtener hasta 5,886 por estudiante y aplicar ese dinero a la matrícula en una lista de escuelas privadas K-12. Este año el costo promedio de las escuelas privadas en Florida es de 7,864.
El programa se centra en las familias de bajos ingresos. Inicialmente, las familias que hacen hasta el 185% sobre la línea federal de pobreza, o que ganaban alrededor de 45,000 por una familia de cuatro, eran elegibles para becas nuevas, y podían renovarlas si llegaban hasta el 200% de la línea federal de pobreza, dijo Matus.
A partir de este año escolar, las familias de mayores ingresos que conforman hasta el 260% sobre la línea de la pobreza, o 64,000 para una familia de cuatro, fueron elegibles para cantidades de beca más pequeñas. En total, unos 98,000 estudiantes utilizan las becas.
¿Qué tipo de escuelas reciben el dinero? Ochenta y cinco por ciento de las escuelas de Florida que acepten las becas son escuelas religiosas, según David Figlio, profesor de educación y política social en Northwestern University, quien evaluó el programa hace unos años.
Los estudiantes que utilizan las becas para asistir a estas escuelas no realizan exámenes estandarizados a nivel estatal, pero sí toman otro examen, con resultados que se reportan por separado.
Las escuelas que reciben 250,000 al año del programa de becas necesitan que un contador público independiente acreditado presente una auditoría sobre sus prácticas financieras, para asegurarse de que no estén utilizando indebidamente los fondos públicos.