Dafne Almazán, la mexicana de menor edad en concluir una maestría en Harvard, ahora explora una nueva faceta al lanzarse este jueves públicamente como cantante y compositora.
"Desde pequeña me ha gustado mucho el piano y el canto. Realmente mi fuerte es el canto, llevo ya cuatro años estudiando profesionalmente", indicó a Efe la también psicológa más joven del mundo.
A sus 19 años, Dafne busca, a través de la música mostrar que los jóvenes superdotados pueden desarrollarse en distintas facetas pues no solo ha estudiado canto, sino también guitarra, violín y piano.
Reconoció que el canto "era mi pasión desde que era muy pequeña" y por ello, ahora que está a punto de concluir un doctorado en Educación Especial en la Universidad Liberty, en Estados Unidos, buscará lanzarse como cantante y compositora.
Con influencias de la música ochentera, la clásica, el pop y baladas románticas, Dafne ha escrito canciones, y su primer sencillo abordará el desamor.
"Desde antes ya había evaluado varias letras y cuando quise sacar una canción (era de) amor o desamor. Y me fui más hacia el desamor", comentó.
La melodía es una balada pop que mezcla muchos estilos como la "balada" o la "electrónica". confesó.
Su siguiente objetivo es lanzar un disco para el cual está trabajando con su maestra, Carla Madrid, soprano y egresada de la Escuela Nacional de Música en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
"Ahora mi primer objetivo es poder sacar un disco para lanzarme como artista", afirmó.
Señaló que también le gustaría dedicarse a la educación musical para ayudar a los niños superdotados a desarrollar sus talentos artísticos, así como a la población en general.
Destacó que para los niños con capacidades especiales, todas las áreas son importantes pues no solo se necesita la parte académica sino la deportiva y la artística.
Aunque Dafne reconoció que en los últimos 10 años se ha avanzado en la eliminación de estereotipos y la discriminación que padecen los niños superdotados, aseguró que todavía falta mucho por hacer al respecto. Especialmente en cuestiones de género.
"Ahorita el tema es la discriminación que se pueda ver en las escuelas o también en la parte de género, que es que la niñas no están siendo diagnosticadas", indicó.
De acuerdo con una investigación de su hermano, el doctor Andrew Almazán, llamada "El verdadero rostro del niño genio", el número de niños superdotados diagnosticados en México era del 80 %, mientras que de las niñas era solo del 20 %.
Es por eso que desde el 2016 inició una campaña enfocada en la detección de más niñas superdotadas para lograr así un equilibrio de género en este tipo de población.
Aseguró que la falta de detección de niñas superdotadas se debe a las barreras y estereotipos que se tienen.
"Tienen que estar calladas, quedarse sentadas, no pueden mostrar que son diferentes y esto las lleva a que se adapten al sistema y no quieran mostrar" sus capacidades, afirmó Dafne.
Señaló que para ella es una gran responsabilidad saberse como referente de cientos de niños y niñas superdotados en México y el mundo que quieren seguir su ejemplo.
"Veo cómo muchas niñas y niños que pueden voltear a verme, me responsabiliza para querer enseñarles. (Aunque) es un trabajo en equipo, estuvieron personas detrás y Dios, que me dio esta habilidad", concluyó.