Las familias que no cuenten con recursos para regresar a México los restos de una persona que murió en el extranjero pueden solicitar apoyo económico al gobierno.
Durante la pandemia por el Covid-19 se han complicado las labores de repatriación, así que las autoridades recomiendan incinerar el cuerpo de una persona que murió por el coronavirus, pues las cenizas representan un menor riesgo sanitario.
La funeraria realiza la repatriación del cuerpo pero las autoridades mexicanas deben de dar su aval para que ingrese al país.
El consulado de México en Indianápolis, Estados Unidos estima que el costo promedio de un traslado básico va de los tres mil (70 mil MXN) hasta los 5 mil dólares (122 mil MXN). El servicio incluye el transporte del cuerpo desde el hospital o las instalaciones forenses, los documentos de certificación, el embalsamamiento o la cremación, así como su llegada a un aeropuerto cercano, con destino a México.
Ningún consulado realiza este proceso, pero puede recomendar algunas funerarias que lo llevan a cabo, para que los familiares del fallecido analicen su mejor opción.
No hay un tiempo fijado de lo que tarda un traslado, ya que depende de la causa de la muerte, la disponibilidad de vuelos y de la funeraria contratada. En estos meses se ha prolongado el tiempo en diferentes partes del mundo porque los servicios funerarios se encuentran saturados por las muertes de Covid-19. Además, miles de vuelos se han suspendido.
El gobierno solo puede apoyar con parte del costo de los servicios básicos de traslado, el embalsamamiento o la cremación a las personas que demuestren que no cuentan con recursos para ello, según la guía de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Es necesario acudir a uno de los Consulados mexicanos en el exterior y presentar la solicitud. Las autoridades comprobarán que no pueden pagar por los gastos y determinarán el monto del apoyo a entregar directamente a la funeraria.
Para solicitar mayor información sobre el traslado de restos, los mexicanos deben enviar un correo electrónico a la dirección dgpmexterior@sre.gob.mx.
Los familiares deben tener acta de nacimiento e identificación del fallecido, así como una identificación propia.
La funeraria y las autoridades del lugar donde murió deben otorgar una acta de defunción traducida y apostillada; el certificado de embalsamamiento o cremación; el permiso de tránsito de los restos y las facturas de los servicios que se contrataron.
Por último, el consulado mexicano puede emitir una acta de defunción, visa al certificado de embalsamamiento o cremación y al permiso de tránsito de los restos.
pb