Es común que pienses que necesitarás mil cosas estando fuera de casa. Quieres llevar contigo comida, objetos de higiene personal, más ropa de la necesaria (por si ocurre un accidente, quién sabe), libros y hasta objetos personales como peluches. ¡Para! No necesitarás todo.
Toma en cuenta que no podrás ingresar todos los artículos en el aeropuerto. Está prohibido cargar objetos cortantes, armas de fuego (obvio), herramientas, artículos deportivos y de artes marciales y sustancias químicas. Olvídate de llevar en tu equipaje de mano cortauñas, fósforos y paraguas.
Los reglamentos aeroportuarios permiten cargar hasta 25 kilogramos en tu equipaje, pero no te excedas. En lugar de llevar tus pesas para ejercitarte, empaca una cuerda para saltar.
Marie Kondo, la gurú del orden japonesa, recomienda en su libro “La magia del orden” destinar espacios específicos específicos para el mismo tipo de objetos. Guarda en un compartimento de la maleta tus objetos de higiene personal, en otro tu ropa y tus zapatos. Así tendrás en mente qué te falta y tendrás las piezas de ropa exactas para pasar tus días de viaje.
Para ahorrar espacio, olvídate de los peluches, tazas, muñecos y objetos que tienen un gran valor sentimental, pero que sabes que no ocuparás.
Si vas a la playa, no tiene sentido que empaques chamarras y suéteres. Revisa las condiciones climáticas que habrá y lleva los “outfits” adecuados. Si pasarás la mayor parte fuera del hotel, piensa dos veces si quieres llevar tu colección de libros.
Según Marie Kondo, la ropa se dobla de manera vertical para ocupar menos espacio. Aquí te dejamos uno de sus videos para que sepas cómo hacerlo.