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El creativo guía y fotógrafo Jesse Welter es el encargado de este tour que visita edificios oxidados y abandonados en zonas industriales abandonadas de principalmente en el norte de Detroit.
El tour, que tiene un costo de 75 dólares, inicia a través de una entrada de acero oxidado, escombros y cristales rotos que permite acceder al "Fisher Body Plant 21", un abandonado coloso de hormigón donde se producían componentes para General Motors. Hoy, en ruinas, es uno de los hits de esta visita guiada.
La visita guiada se lleva a cabo a lo largo de decenas de miles de metros cuadrados de decadencia urbanística, donde aparecen oxidados armazones de acero, paredes de yeso que se desmoronan, muebles desvencijados y una galería underground de graffitis de primer nivel.
Welter realiza uno o dos tours por semana, principalmente tomado por fotógrafos y curiosos, pero la demanda de participantes se mantiene intacta, por lo que ya es un negocio rentable.
Ruin porn, como es catalogado por los fotógrafos, se refiere a las instantáneas de este tipo de edificios que narran la decadencia de la metrópolis fronteriza con Canadá.
Sin embargo, no a todos les gusta la idea. "Quien quiera llamar la atención sobre la situación de Detroit debería centrarse en sus ciudadanos, no en los edificios", declaró la candidata a la alcaldía Jean Vortkaamp.
Actualmente, Detroit lucha por frenar su pérdida de población, las deudas que la aquejan y la tasa de criminalidad más alta de Estados Unidos.
