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Con todo lo que implica organizar una boda, crecen los niveles de estrés en las parejas, así que lo que menos necesitan son trámites complicados.

En Texas no necesitas ser residente del estado para casarte, un pasaporte mexicano es aceptado como identificación y prueba de edad.

Para obtener una licencia de matrimonio, ambos contrayentes deben presentarse en la corte municipal con sus identificaciones, llenar una solicitud de licencia para casarse, pagar la cuota de 70 a 80 dólares, que  la mayoría de los condados tienen como tarifa.

Una vez obtenida la licencia existe un periodo de 72 horas mínimo que la pareja debe esperar para celebrar el matrimonio. Esta licencia es válida por 90 días.

La licencia de matrimonio no se otorga a personas del mismo sexo en el estado.

El matrimonio puede ser oficiado por un ministro religioso, un rabino o sacerdote autorizado para oficiar la ceremonia. También un gran número de jueces y funcionarios de paz pueden celebrarlo.

La persona que oficia la ceremonia, firma y entrega la licencia al registro civil (Office of Vital Records) para la emisión del acta de matrimonio.

Una copia del acta cuesta alrededor de 10 dólares en Texas.

Es importante destacar que no solo por casarse en el estado se modifica la situación migratoria, a menos que uno de los dos contrayentes sea ciudadano o residente legal, y para esto habrá que hacer el trámite correspondiente ante las autoridades de inmigración.

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