El triunfo de 6 goles a 0 sobre Cuba no significa nada, dijo el técnico de la Selección Nacional Mexicana, Miguel Herrera en conferencia de prensa, Cuba es el rival más débil.
Oribe Peralta quien llegaba a este torneo como el suplente del Chicharito, se convierte así en el indiscutible jugador central del equipo al anotar 3 de los 6 goles de la aplastante victoria
Los cubanos aguantaron los primero 17 minutos de un partido que México estaba más que obligado a ganar, estaba obligado a convencer.
Luego de la larga lista de juegos sin ganar y de un paso sin pena ni gloria por Copa América, el equipo mexicano saltó a la cancha del Soldier Field en Chicago con hambre de mostrarle a sus críticos que tiene con que ganar este torneo.
La competencia esta pareja, dijo el Piojo Herrera, Estados Unidos jugó muy bien ante Honduras y Jamaica sorprendió al ganarle a Costa Rica.
Es apenas el primer juego de la serie de tres de la ronda clasificatoria en un grupo en el que México debe mostrar su contundencia ante tres rivales que en teoría no son real competencia, la verdadera prueba vendría después ante Estados Unidos.
Por lo pronto los más de 54 mil aficionados que llenaron el estadio, en su mayoría apoyando a la selección mexicana, tuvieron su fiesta de goles.
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