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El rock a todo volumen, las luces comienzan a encenderse y el latido de los corredores comienza a acelerarse, todo está listo para el Rock N’ Roll Running Series en Las Vegas, la experiencia que todo runner debe vivir.
The Strip, la avenida conocida por ser el corazón de la ciudad, cambió las ruedas de los autos por los pies de los amantes del atletismo listos para correr 5, 10 y 21.5 kilómetros.
El ambiente siempre festivo de Las Vegas lo convierte en una de las mejores ciudades para participar en las competencias Rock N’ Roll Running Series. Residentes y turistas curiosos salen a las calles a lo largo de la ruta para apoyar a los miles de competidores que dan todo su esfuerzo en casa kilómetro.
El sábado fue el turno de los corredores de 5K y el domingo compartieron el pavimento los de 10K y medio maratón, con participantes de todas las edades.
En el punto de partida, situado frente al hotel New York New York, comenzó al calentamiento esperando la señal. Al ritmo de Immigrant Song se dio el banderazo de salida y la carrera inició al filo de las 4:30 de la tarde.
El inicio a trote es perfecto para apreciar los icónicos hoteles de La Ciudad del Pecado, incluidos el impresionante castillo de Excalibur y la imponente pirámide de Luxor.
“RUN, JEFFRY, RUN!”, se leía en uno de los carteles con los que un par de mujeres de plantó a la altura del Mandala Bay para apoyar a uno de los competidores de Rock N’ Roll Running Series Las Vegas.
Aunque la emoción por llegar en un tiempo perfecto invade a los corredores es tentador detenerse un poco para la foto obligada en el letrero Welcome to Fabulous Las Vegas. Poco a poco el spot se llena de decenas de corredores que quieren la imagen del recuerdo.
Antes de seguir corriendo hacia el desierto, la ruta da una vuelta cerca del Aeropuerto Internacional de Las Vegas. A la derecha se ven decenas de aviones estacionados y a la derecha vuelven a aparecer los hoteles. Algunas capillas también quedan de camino, por si alguien no aguanta las ganas de casarse en una boda oficiada por Elvis.
A lo largo de la ruta no sólo resuenan los gritos de apoyo y los aplausos de los espectadores, también hay escenarios en los que bandas de rock no paran de tocar para motivar a los participantes.
Don’t Stop Believin’ suena mientras sobre The Strip de Las Vegas se sienten los pasos de más de 4 mil competidores, sudando por el esfuerzo y ansiosos de llegar a la meta.
Al regresar a la altura de la salida empieza a caer la noche para maravillar a los corredores con la réplica de la Torre Eiffel, los magníficos edificios que componen a The Venetian, los centros comerciales y los anuncios iluminados en los que se promocionan los shows más famosos de Las Vegas.
Hay tanto que ver en el camino que el recorrido se hace más corto y los kilómetros menos pesados. Es el último tramo del recorrido y ya están más cerca los hoteles legendarios de Las Vegas: Caesars Palace y Bellagio, que esta noche lanza el agua de sus fuentes como fondo para la carrera Rock N’ Roll Running Series.
El volumen de la música de rock comienza a subir mientras más se acercan los runners a la meta y finalmente cruzan la línea, entre gritos y aplausos, para recibir su medalla.
Sin embargo, todavía queda un poco de energía para disfrutar de la gran fiesta con música de DJ bajo una bola Disco, y vino blanco, para celebrar el esfuerzo y recompensar al cuerpo por darlo todo.
Los ganadores en los 5 kilómetros fueron Sullivan Clarke con 16:55 minutos y Glynis Milne con 19:34, mientras que en 10K se llevaron el primer lugar Tonald Loewen con 33:37 minutos y Katarina Tadich con 38:13. En el medio maratón se quedaron con la victoria Andy Wacker con 1:04:47 y Alice Wright con 1:14:10 minutos.
Rock N’ Roll Running Series Las Vegas se realiza cada año y el registro para la competencia de 2025 ya está abierta y con precios especiales, para vivir por primera vez la experiencia de correr en la Ciudad del Pecado o repetirla.