TE RECOMENDAMOS
El aeropuerto neerlandés de Eindhoven, que gestiona unos 41,500 vuelos al año a más de 80 destinos, anunció este martes que prohibirá todos los privados que usen combustibles fósiles a partir de 2026, para alcanzar sus objetivos de sostenibilidad con menos ruido y emisiones de CO2 a finales de década.
El aeródromo, situado en la provincia de Brabante, en el sur de Países Bajos, explicó en un comunicado que reforzará su “rumbo hacia un aeropuerto más silencioso y con menos emisiones de CO2” en 2030, año en el que quiere registrar un 30 % menos de ruido y de contaminación procedente del tráfico aéreo, en comparación con 2019.
“Con este ambicioso objetivo, somos líder mundial en la reducción del impacto nocivo de los vuelos en el clima”, señaló el aeropuerto, que detalló las medidas que tomará en la práctica para alcanzar sus objetivos para finales de esta década.
No habrá más vuelos privados que usen combustibles fósiles a partir de enero de 2026, y limitará el número de vuelos a un máximo de 40.500 al año entre 2026 y 2027, para centrarse a partir del año siguiente en las normas del ruido en lugar del número de vuelos. Se estima que la medida llevará a una reducción de anual de 1,000 vuelos en Eindhoven.
Además, el aeropuerto quiere introducir lo antes posible un “procedimiento de despegue” más sostenible para limitar la contaminación acústica en el entorno inmediato causada por el despegue de los aviones hasta que alcanzan la altitud de vuelo.
También apuesta por una renovación total de la flota que pasa por el aeródromo y calcula que, para máximo 2030, solo se permitirán aviones de última generación en el aeropuerto de Eindhoven, como el Airbus A320 NEO y el Boeing 737 MAX.
“Nos habíamos comprometido a una reducción significativa del ruido para 2030, pero reducir el ruido no es suficiente. También nos sentimos responsables de reducir significativamente las emisiones de CO2 de nuestro tráfico aéreo. Hacer que la aviación sea más sostenible en Europa es ambicioso y factible”, señaló Roel Hellemons, director ejecutivo del aeródromo.
También habrá una mayor obligación de mezclar combustible de aviación sostenible en el aeropuerto e incluso una compensación financiera anual del aeródromo para las aerolíneas que reposten con este combustible. EFE
