Durante un vuelo hay varias reglas que se deben cumplir por seguridad de la nave y los pasajeros, una de ellas es evitar el uso de teléfonos celulares o cualquier dispositivo electrónico que necesiten señal para funcionar.
Aunque parece un mito porque vemos en la televisión o en las películas que se permite su uso durante un vuelo comercial o privado, el uso del celular para llamadas o mensajería sms en realidad sí está prohibido para evitar problemas con las señales de la aeronave.
La Administración Federal de Aviación (FAA en inglés) dice que las señales de los teléfonos móviles en el aire interfieren con los “instrumentos críticos de la aeronave”, por lo que deben estar estrictamente en modo avión, apagados o con la conexión celular desactivada.
En caso de necesitar de su uso durante un vuelo, sin importar la distancia, sólo se debe activar el modo avión y la conexión WiFi, en caso de que el avión tenga internet por WiFi instalado y abierta a los usuarios.
El Código de Regulaciones Federales de Estados Unidos dice acerca de los celulares: “Los teléfonos celulares instalados o transportados a bordo de aviones, globos o cualquier tipo de aeronave no deben operarse mientras dichas aeronaves estén en el aire (sin tocar suelo). En cualquier aeronave que abandone el suelo, todos los teléfonos a bordo de esa aeronave deben estar apagados. Y si no cumple, se puede emitir una multa”.
Según se ha encontrado, el uso de teléfono celular o computadoras portátiles emiten transmisiones activas en el espectro electromagnético, que usan comúnmente celulares, radios y redes WiFi.
En sí, los problemas de señales interferidas no afectan directamente al avión o son causa de algún accidente fatal, sino que el problema se centra en las torres de control de los aeropuertos, ya que afecta la comunicación entre éstas y las aeronaves.
Otra razón por la que se prohíbe el uso de celulares en los aviones es que aumenta las probabilidades de sobrecargar las torres de telefonía en la tierra.
Los expertos de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) explican que en las fases cruciales del vuelo, durante el despegue y aterrizaje, los celulares se conectan a varias torres de telefonía, tomando en cuenta la cantidad de pasajeros con este dispositivo despegando, aterrizando y en medio de un vuelo a latitudes bajas, las torres se saturan por horas causando conflictos especialmente a los aeropuertos.
Dan Bubb, ex piloto y profesor de la Universidad de Nevada señala que las redes 5G de los celulares son una amenaza para las torres de control y los aviones, ya que “tienen el potencial de interferir con el radioaltímetro, que es el instrumento en el que confían los pilotos para indicar cuándo necesitan enderezarse o levantar la rueda de morro del avión para aterrizar.
Y agrega: “El ancho de banda específico que utilizan los operadores de telefonía celular de Estados Unidos para los servicios 5G es muy cercano al mismo ancho de banda utilizado por el radioaltímetro, lo que aumenta el potencial de interferencia”.
El experto en aviación apunta que el radioaltímetro es una guía indispensable para los aterrizajes con poca visibilidad.