Chicago lleva siete años consecutivos con el título de la Mejor ciudad grande para visitar en Estados Unidos que otorga la revista Condé Nast Traveler. Conquista a los visitantes con una oferta turística enorme que va desde parques, paseos arquitectónicos y miradores icónicos hasta restaurantes de estrella Michelin y museos de arte.
Definir cuál es la mejor temporada para viajar puede ser complicado porque depende de los gustos del viajero. La Ciudad de los Vientos tiene grandes atracciones para quienes aman la música, las actividades al aire libre, pero también para quienes el invierno es su estación favorita.
Si lo que priorizas es el clima, te conviene viajar en abril y mayo cuando las temperaturas son cálidas, pero no tan abrumadoras como en el verano.
Septiembre es uno de los mejores meses para viajar a Chicago porque usualmente ya acabaron las lluvias, las temperaturas aún no son tan frías como en el invierno y siguen las actividades al aire libre (algunas con horario reducido). La temperatura ronda entre los 15°C y 21°C durante el día, pero en la noche baja a alrededor de 4.4°C.
Evita enero y febrero porque el invierno es muy crudo, con temperaturas por debajo de los 0°C. Debido al ambiente gélido, casi no hay atracciones al aire libre y algunos recintos turísticos –como miradores– cierran por tormentas de nieve.
El verano, de junio a septiembre, es la temporada ideal para viajar si quieres vivir festivales musicales (como Lollapalooza), gastronómicos y una oferta de atracciones completamente abierta. También es la mejor temporada para subir a los miradores con cielos brillantes.
Sin embargo, toma en cuenta que es la temporada más popular para viajar y es probable que tengas que hacer filas para las atracciones más icónicas. Además, como aumenta la demanda de vuelos y hospedaje, los precios también suben. Si viajarás durante estos meses, lo más recomendable es reservar tu hotel con tres o cuatro semanas de anticipación.
El mes de diciembre también es una temporada muy popular de viaje por las atracciones navideñas. Desde finales de noviembre, la ciudad presenta un desfile de Navidad y en diciembre abre el mercado navideño Christkindlmarket, se instala el árbol navideño en Daley Plaza y los turistas visitan Lightscape, entre muchas otras atracciones.
La temporada más barata para viajar a Chicago es de mediados de enero y todo febrero, debido a que la temperatura baja considerablemente y hay tormentas de nieve. Por esta razón, bajan las demandas de vuelos y los precios de hotel. Sin embargo, toma en cuenta que algunas atracciones pueden estar cerradas.
Tras explicar lo anterior, podemos concluir que los mejores meses para viajar a Chicago son abril, mayo, octubre y noviembre. Hay un buen clima, seguramente encontrarás actividades al aire libre y los precios no son tan altos como en las temporadas de vacaciones.