Dado que muchas aerolíneas ya no dan refrigerios a sus pasajeros con paquetes de vuelo básicos, una de las preguntas que más se hacen los viajeros principiantes es ¿puedo llevar mi propia comida al viajar en avión?
La respuesta general es SÍ. La Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) permite llevar casi toda la comida sólida en el equipaje de mano y tiene la indicación de permitir comida líquida o bebidas sólo en envases menores de 100 mililitros.
Las prohibiciones en cuanto comida en el equipaje de mano son muy pocas y se reducen a carne y mariscos frescos y ciertas verduras, según el país de procedencia.
Pan, dulces, cereal, queso sólido, chocolate sólido, galletas, galletas saladas, frutas secas, chicles, nueces.
Carne, mariscos y vegetales cocidos sin líquidos. Tartas, pasteles, pizza. Sándwiches, tortas.
Comida sólida para mascotas, sal, especias, bolsitas de té secas.
Bebidas alcohólicas, agua embotellada, queso cremoso, chocolate líquido, café líquido, dips y untables cremosos, salsa, miel, hummus, helado, mermelada y jalea, jugos, aceites y vinagres, mantequilla, aderezo para ensaladas, refresco, sopas, yogur.
Frutas y verduras frescas: “Los pasajeros que vuelan desde Hawái, Puerto Rico o las Islas Vírgenes hacia Estados Unidos no pueden llevar la mayoría de las frutas y verduras frescas debido al riesgo de propagar plagas invasoras de las plantas”, señala la TSA.
Carnes y mariscos frescos: Si están cubiertos de hielo, éste debe estar completamente congelado al pasar por seguridad. Si el hielo se derrite no se permitirán los alimentos en el equipaje de mano.
Alimentos congelados: El hielo debe estar completamente congelado al pasar por el tamiz. Si hay líquido en el fondo del contenedor no se permitirá.
Langosta viva: Debes consultar a la aerolínea para saber si la permiten en el equipaje de mano. Llevarla en la maleta facturada es posible, pero “debe ser transportada en un contenedor de plástico transparente a prueba de derrames”, según la TSA.
Bebidas alcohólicas con más de 70% de alcohol.
La comida enlatada es mejor llevarla en el equipaje facturado, pues es posible que no pase la regla de los líquidos de menos de 100 ml.