La costa de la ciudad de Imperial Beach, en el condado californiano de San Diego, fue completamente cerrada a los bañistas por los altos niveles de contaminación en el mar, proveniente de las aguas residuales del río Tijuana, en México.
La primera restricción la anunció el Departamento de Salud Ambiental del Condado de San Diego, el 29 de noviembre de 2018, de forma parcial. Sin embargo, el pasado domingo se amplió desde la frontera con México, hasta el extremo norte de Imperial Beach y 152 metros de Carnation Avenue.
La contaminaciónque llega a la costa sur de San Diego proviene del río Tijuana, contiene basura, aguas residuales y otro tipo de contaminantes, de acuerdo con el sitio web de la dependencia.
El agua del río de la ciudad de Tijuana, en Baja California, llega hasta el Océano Pacífico, durante la temporada de lluvias de invierno, y se extienda hasta las playas de California.
Tijuana tiene un proceso de tratamiento para mejorar la calidad del agua, pero en la época con mayor precipitación pluvial, el sistema no puede tratar todo el líquido que llega y se filtra hasta California.
El Departamento de Salud Ambiental del Condado de San Diego realiza pruebas constantes para comprobar la calidad del agua y mantener o retirar los letreros de las playas que prohíben el ingreso al agua.
Según The San Diego Union Tribune, los habitantes y autoridades de las ciudades de Chula Vista e Imperial Beach han exhortado al gobierno a mejorar la infraestructura del drenaje de Tijuana para evitar que las aguas residuales se propaguen.