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Científicos de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de Estados Unidos (NASA) descubrieron un asteroide que tiene posibilidades de colisionar con la Tierra en un futuro próximo.
El asteroide, denominado como 2024 YR4, fue detectado por primera vez a finales del 2024 por un telescopio profesional ubicado en Chile. Se estima que tiene aproximadamente dimensiones de entre 40 y 100 metros de diámetro, pero las investigaciones continúan.
“El asteroide 2024 YR4 fue informado por primera vez el 27 de diciembre de 2024 al Minor Planet Center, el centro de intercambio de información internacional para mediciones de posición de cuerpos pequeños, por la estación del Sistema de Última Alerta de Impacto Terrestre de Asteroides financiada por la NASA en Chile”, señala la NASA.
Los expertos del Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra de la NASA dicen que el cuerpo espacial está bajo investigación conforme se aleja de la Tierra para comprender su trayectoria dentro del Sistema Solar.
El 2024 YR4 llamó la atención el 31 de diciembre de 2024 cuando fue incluido en la lista de riesgo automática Sentry de la NASA, que incluye a todos los cuerpos celestes, especialmente asteroides, cercanos a la Tierra que tienen probabilidad distinta a cero de impactar contra nosotros en un futuro.
Hasta el momento se comenta que por ahora hay 1.2 por ciento de posibilidades de que el City Killer o el Asesino de Ciudades, como lo han apodado, colisione con la Tierra, pero se estima que esto cambie en los próximos años hasta el 2032, año considerado para que haga su máximo acercamiento.
En caso de que aumenten las posibilidades de choque, el asteroide no impulsaría la extinción humana, pero sí podría acabar con una gran ciudad debido a la energía liberada de aproximadamente 8 megatones, algo así como 500 veces más la cantidad de la bomba atómica que devastó Hiroshima.
“No nos preocupa en absoluto, porque hay un 99 por ciento de posibilidades de que no nos alcance. Pero merece atención”, dijo en un comunicado Paul Chodas, director del Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra de la NASA.
En una investigación hecha entre la NASA y la Agencia Espacial Europea se estima que la roca espacial desaparecerá gradualmente de la vista en los siguientes meses, hasta entonces los telescopios más potentes seguirá analizando su existencia y trayectoria.
Si bien se cree que tendrá su máximo acercamiento con la Tierra en 2032, el asteroide podría dejarse ver dentro del Sistema Solar en 2028 y después se vería en 2074 en caso de que siga existiendo.