Santa Mónica es un destino playero en la costa pacífica del sur de California perfecto para visitar a lo largo del año gracias a su clima oscilante en los 22 grados, casi 300 días de sol y numerosas atracciones turísticas.
De acuerdo con datos del sitio web oficial de la ciudad, ésta recibe más de 7 millones de visitantes al año en busca de juegos mecánicos a la orilla del mar con Pacific Park, restaurantes multiculturales, clubes nocturnos y espacios de descanso a lo largo del Muelle de Santa Mónica.
Es común ver a locales, visitantes e incluso una que otra celebridad jugando en la arena, tomando el sol o practicando yoga a la orilla de la playa a la vez que esperan la llegada de las famosas puestas de sol.
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El blog Santa Monica Beaches recomienda visitar esta ciudad californiana en temporadas específicas para encontrar descuentos en hospedaje y menos aglomeración.
Por ejemplo, en invierno y primavera el sol calienta lo suficiente para obtener un buen bronceado, los precios de hoteles bajan y las atracciones están despejadas.
Verano es la temporada alta por lo que los precios subirán, habrá más turistas, el clima inicia con neblina hasta convertirse en los días con más calor.
Durante el otoño o ‘verano indio’ el clima se mantiene caliente, comienzan los descuentos en hospedaje y vuelos, los días están despejados y son ideales para salir a nadar o pasear por sus muelles.
Santa Mónica es un claro paraíso para los paseos en bicicleta por los espacios especiales en carreteras o a la orilla del mar.
También es considerada una ciudad amigable con la comunidad LGBT gracias a su estilo de vida liberal, cientos de establecimientos nocturnos, playas y hoteles en donde encontrarás el ambiente único que la comunidad ofrece.
No importa que tu visita sea dentro de un periodo vacacional o de una escapada de fin de semana, la ciudad ofrece una gran variedad de cosas por hacer.