La base de la fuerza aérea estadounidense Davis-Monthan que se puede ver desde la carretera interestatal 10, es la sede de lo que los lugareños llaman “El deshuesadero” y el sitio donde se almacenan miles de aeronaves hasta que su destino final sea determinado.
El clima seco, aire limpio y libre de contaminación crean el lugar ideal para evitar la corrosión de los aviones, también el suelo alcalino que permite arrastrarlos sin que se hundan en la tierra son las razones principales por las que llegan ahí.
El "cementerio" o la "tumba" como también se le conoce no es un lugar de desperdicio, por el contrario se calcula que vale millones de dólares en partes, que son usadas como remplazo de otras aeronaves en funciones, incluidas naves militares y las que se venden a otros países.
Los aviones están organizados en cuatro categorías, los que son únicamente para partes de remplazo, los que están en condiciones de volver a volar, los que se vendarán a otros países y los que se conservan para fines culturales con destino a museos, plazas o entradas a bases aéreas.
El Museo Pima del Aire y el Espacio organiza tours los 7 días de la semana, en los que se pueden apreciar los miles de aviones e incluso tomar fotos y videos para uso personal desde el autobús, pues no está permitido subirse a las naves.
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